El Costa del Sol, pie y medio fuera de Europa

Sencillamente, esta vez, su contrincante fue mejor durante todo el partido. No pudieron frenar el torrente de juego y el poderío físico del conjunto noruego, líder de grupo de la EHF European League, y cayeron las malagueñas en el feudo rival por 36-31. Penalizó en exceso el nefasto inicio de partido de las visitantes, encajando un 5-0 en menos de cuatro minutos que las llevaría a ir a remolque todo el tiempo.

La renta llegó a ser de hasta seis tantos para el Sola, y la menor ventaja, de tres. No encontró la fórmula el Costa del Sol para reducir el poderoso ataque nórdico, su tiro exterior y su gran porcentaje de acierto. Un equipo que se mostró muy sólido de inicio a fin, con una defensa difícilmente penetrable para las malagueñas y una portera que es convirtió en artífice de la victoria. A pesar de no lograr la comodidad de siempre en su juego, durante la primera mitad, Sara Bravo, desde el extremo y Bitolo, desde la frontal del área, lideraron la ofensiva de un equipo que necesitaba reaccionar en la segunda mitad.

Sin embargo, pareció ahogarse en la frustración el cuadro visitante viendo pasar los minutos sin poder reducir la renta de cinco tantos que reinó la mayor parte del partido. Ni siquiera el juego con los extremos o los pases imposibles de Silvia Arderius parecían ser suficiente, porque el Sola no bajaba el ritmo de anotación, liderado por Novak, con 8 goles, ni tampoco dejaba hueco alguno en su defensa.

Por suerte o por desgracia, aún queda una última baza para el equipo de Suso Gallardo, que podría pasar de ronda si el Targu Jiu rumano vence este domingo por la tarde al Motherson Mosonmagyarovari húngaro. Una tarea muy improbable, dado que en las cinco jornadas anteriores, el cuadro rumano no logró vencer ni un partido. Ahora, el futuro de las malagueñas está en sus manos. Mientras, sólo queda descansar, pasar el mal trago de esta aciaga derrota y comprender que, con el tiempo, sabrán darle a su aventura europea de esta temporada el valor y el reconocimiento que merece, porque sólo con acceder a esta fase de grupos y pelear hasta la última jornada por los cuartos de final, ya es motivo de orgullo.