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Blanco compatibiliza la televisión con la radio, «una necesidad». R. C.
«Moriré con 'Zapeando'»

«Moriré con 'Zapeando'»

El programa de sobremesa de La Sexta cumple cinco años, todos ellos bajo la tutela del presentador Frank Blanco.«Empecé el primer día y estaré el último», asegura

JULIÁN ALÍA

Jueves, 22 de noviembre 2018, 00:03

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Con más de 1.200 emisiones a sus espaldas, y con el contador de colaboradores en 41, 'Zapeando', el espacio de sobremesa que emite La Sexta de lunes a viernes, celebra hoy a las 15.45 horas su quinto aniversario. Un día de fiesta, a la que han invitado a Arturo Valls y Jorge Fernández, «auténticos protagonistas de estos cinco años, porque han dado muchos momentos al programa», dice su presentador. Frank Blanco (Barcelona, 1975) asegura que habrá números musicales al inicio y al final de una entrega especial que «va a traer muchos buenos recuerdos a los más antiguos seguidores de 'Zapeando'».

- ¿Cómo han sido estos cinco años?

«Si Atresmedia me vuelve a proponer dar las campanadas, allí estaré»

- Una montaña rusa de emociones. Profesionalmente, los mejores de mi vida. Lo están siendo, vamos. 'Zapeando' me ha cambiado la vida; me la ha alegrado, tanto a nivel personal como profesional. No tengo un momento mejor que estos cinco años con el programa. La televisión tiene sus altibajos y sus cosas, pero el balance es inmejorable.

- ¿Esperaba llegar a este punto?

- Es muy curioso; antes del primer programa, en directo, estaba convencido de que iba a funcionar más o menos como ha funcionado. Era muy optimista. Pero, cuando acabamos, salí agotado mentalmente. Era como si me hubieran pegado una paliza de la tensión y los nervios de presentar. Y además, nos salió bastante mal, porque una cosa es lo que sale en la tele y otra, lo que estaba previsto que saliera. Me dije: 'esto es terrible. No sé cuánto va a durar como no lo arreglemos'. Tuve sentimientos encontrados durante semanas, hasta que las cosas se colocaron y fuimos capaces de arreglar el programa.

- ¿Le cuesta acostumbrarse a tanto cambio de colaboradores?

- Me ha resultado muy natural. Salvo las primeras semanas, que sí que hubo muchas idas y venidas. Pero desde el programa número dos está Quique Peinado, desde el uno está Miki Nadal, en las tres primeras semanas se incorporaron Ana Morgade y Cristina Pedroche, que siguen a día de hoy. El núcleo duro de la mesa, las caras fijas, está ahí casi desde el principio. Luego sí es cierto que algunos compañeros, al tener otros proyectos profesionales, van dejando la mesa, se incorporan otras caras..., pero para mí eso es sano. No lo veo como un problema. Hacen un proyecto que les gusta y vuelven con energías renovadas. El gran beneficiado es el espectador, que encuentra que los colaboradores siempre tienen ganas. El día que alguien se siente en la mesa sin ellas, tendremos un gran problema.

- ¿Y para usted no hay nuevos proyectos?

- No, no. Mi proyecto es seguir vivo. Soy muy de ideas fijas, aunque parezca extraño que alguien que lleva cinco años presentando un programa diga: 'yo moriré con ello'. No hay cabida a proyectos nuevos que no sean compatibles con 'Zapeando'. Empecé el primer día y estaré el último. También hemos arrancado un programa nuevo en Europa FM hace unos meses, y mi vida no me deja mucho hueco para más. Tampoco estoy buscando otra cosa, estoy muy a gusto donde estoy.

El «vicio» de las ondas

- ¿Ni siquiera repetir las campanadas de fin de año?

- Eso es otra cosa. Lógicamente, es algo compatible con todo. He dado las campanadas en tres ocasiones en La Sexta, y en Atresmedia saben que no suelo poner muchos problemas. Al igual que en la radio, la cabra tira al monte. Si deciden proponérmelo, allí estaré, porque para mí es un honor.

- Está muy asentado en la tele, pero nunca abandona del todo la radio...

- Creo que es vicio. Me puse delante de un micrófono por primera vez con trece años. Llevo más tiempo de mi vida con el micro que sin él. La televisión es un medio que me encanta, me apasiona, me siento muy cómodo y me hace feliz, pero la radio también. Me complementa y es otra manera de comunicar. Es como mucho más personal. He pasado alguna época sin hacer radio y he tenido mucho 'mono'. Es una necesidad que tengo, y si encima encuentro gente inconsciente que me quiere contratar...

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