Los niños del indie siguen mutando

Cuando se introduce su nombre en Youtube, lo primero que sugiere la plataforma es 'niños cantando' o 'niños jugando', extrema casualidad cuando ellos hacen lo propio con una profesión en la que cumplen 23 años desde que lanzaron su primer disco, divirtiéndose con la creación genuina de letras y melodías himno, entonando y desgastando sus instrumentos. Juan Alberto Martínez, voz principal y guitarra del grupo, atiende a SUR mientras se recupera de un cólico nefrítico que le ha tenido en 'stand by' durante un par de semanas. El concierto de esta noche en Alhautor, en la Finca El Portón de Alhaurín de la Torre, será el primero tras el pequeño susto para el vocalista de la banda; aunque por su expresión, el afán por el reencuentro para poder abrir su 'ventana' al mundo pesa mucho más que la convalecencia.

Además, no hay duda de que aún mantiene el espíritu y el porte de aquellos jóvenes que comenzaron con un pequeño grupo en Granada: «La parte de niños que nos queda es la que se sube al escenario. De hecho, el nombre del grupo parecía no tener sentido en el momento, cuando fundamos la banda con influencia grunge. Pero ahora nosotros sí que vamos mutando, aunque los niños siguen ahí. Es nuestra parte más pura, la que aflora y se embriaga de la música», relata con una sonrisa que se intuye tras el altavoz del teléfono móvil.

Si bien es cierto que acomodarse en una escena llena de estímulos constantes no es nada sencillo, aunque la rutina o el olvido de una meta precisa puede derivar en que la innovación a la hora de hacer nuevos temas sea escasa o incluso nula. Desde luego, no es lo que les ocurre a estos músicos cambiantes, algo que demostraron sobradamente el 20 de marzo de 2020, cuando 'Ventanas' sale en pleno confinamiento para ser alivio y compañía, atrevimiento y osadía para plantar cara a una racha de viento fuerte que azotaría al mundo cultural: «La pandemia no ha supuesto para nosotros una inmersión en nuevas canciones, sino la espera para poder sacarlas a pasear. El gusanillo de hacer nuevos temas nos llega cuando ya nos hemos cansado de las anteriores, y aún quedan unos cuantos directos para que eso ocurra. Cada vez que las tocamos les descubrimos nuevas posibilidades y avanzando en ellas. Las canciones tienen mucha vida después de dejarlas registradas en el estudio», afirma contundente el vocalista. Lo cierto es que en ese rodaje de 'Ventanas' los temas no necesitan seguir transformándose, pero sí exigen muestra al mundo por la complejidad de su composición.

A través de ellos, cada uno puede mirar hacia fuera como le apetezca, pero en el sentido primigenio adquiere otro matiz: «Nos gustaba esa dualidad de ver las ventanas como lugares por los que ver y ser vistos. Y hay gente que mira más o menos lejos», confirma Juan Alberto. Así que sin pensarlo dos veces extender el camino y jugar con los reflejos, convirtiendo lo que podría haber sido álbum más en su carrera en cinco bloques especiales que se abrazan en la idea de disco, que es muy distinto.

Con las canciones armadas en su forma más simple, apostaron por llevar las diez a cinco estudios diferentes; es decir, cinco maneras totalmente distintas u opuestas de entender la música para crear un total ecléctico, pero que siguiera sonando a 'Niños Mutantes'. De esta forma, participaron en ese proceso de producción Christina Rosenvinge, Noni López y Javier Dora, Carlos Pereiro y Anxo Ferreira, Raúl Pérez o Ángel Luján, cada uno con una idiosincrasia que los integrantes de Niños Mutantes eligieron (o se dejaron llevar) para construir un álbum lleno de creatividad, arte y miras, muchas miras.

Un año después, ante una situación cultural general que no parece tornar en mejora, desde el grupo reconocen que se llevó y se sigue llevado con «torpeza» la gestión de un sector fundamental para el correcto funcionamiento del engranaje de un país. Aunque más que «subvenciones y ayudas, el hambre siempre ha sido de subirse al escenario», que es lo que más se echa en falta en los meses de sequía para poder recargarse de una energía que se dispara en muchas direcciones: esperemos que para la banda granadina sea seguir creando otros 23 años más, por lo menos.