Alejandro Fernández provoca un miércoles romántico en Marenostrum

Aunque se hizo de esperar antes de salir a su velada fuengiroleña. La hora prevista para que apareciese en el escenario era a las 22.30 horas y pasados tres minutos de ella el público ya estaba impaciente: «¡Alejandro, Alejandro, Alejandro!», gritaban desde la pista sus fans deseosos de que el mexicano saliera. Y tuvieron que tener más paciencia de la que creían porque el cantante se hizo de rogar. Ya le pasó en Madrid en el inicio de gira, que salió 20 minutos más tarde de lo previsto.

A pesar de las peticiones constantes del público de Marenostrum, Alejandro Fernández se lo tomó con calma para salir a cantar. Las luces del escenario se fundieron en negro total y los móviles se venían arriba en el público de Marenostrum, que anoche llegó aproximadamente a las 5.000 personas. «¡Vamos, Alejandro!», decían entre chiflidos. Del fundido negro a las luces rojas del escenario, que dejaron por fin ver a la banda de mariachis del cantante. Un solo de trompeta se anticipó ante la entrada del esperado artista mexicano, que pisó las tablas del escenario de Fuengirola justo a las 23.00 horas.

La elegida para el comienzo fue 'Tantita Pena'. Pero antes de empezar a cantar paseó por el borde del escenario para saludar a sus fans. Su estilismo no falla: traje y sombrero de charro. Y su bigote, que quedó pronto al descubierto cuando dejó a un lado el sombrero con el que arrancó el concierto. A la tercera canción ya quiso homenajear a su padre, uno de los grandes mexicanos recordados, que falleció el pasado 2021 con 81 años. Por él, por Vicente Fernández cantó 'Estos Celos' y sus fans también: «¡Se la saben!», exclamó el cantante en sus primeras palabras a Marenostrum.

Pero llegó el momento del saludo: «¡Buenas noches, Fuengirola! Qué gusto poder regresar... El corazón no me cabe en el pecho de estar en vivo nuevamente con todos vosotros aquí en Málaga y todos sus alrededores, aunque bien sé que viene muchísima comunidad latina a la que queremos saludar», comentó el cantante para provocar que se levantasen las banderas latinoamericanas. Además, hizo referencia a esos cinco años que llevaba sin subir a los escenarios españoles: «No fue a propósito, pero llevábamos cinco años sin venir a España y quiero agradecerles el cariño que nos tienen siempre. Gracias, ¡los amo! ¡Los quiero mucho!», dedicaba el mexicano cuando ya se había empezado a poner romántico para la cita.

Uno de los momentos más emocionantes para los sensibles de la noche llegó con 'Hoy tengo ganas de ti', canción con la que las parejas se abrazaron hasta cantar juntos: «Quiero en tus manos abiertas buscar mi camino... Quiero apagar en tus labios la sed de mi alma y descubrir el amor juntos cada mañana». Eso acabarían buscando algunos esa noche, aunque antes de eso seguía el concierto de Alejandro Fernández y sus canciones con las dedicatorias más pasionales como 'Si tú supieras' o 'Quiero que vuelvas'.

Antes de seguir cantando sus himnos de siempre quiso hacer uno de sus últimos temas, lanzado hace apenas unas semanas: 'No es que no me quiera ir'. Aunque, a pesar de cantar al desamor, Alejandro Fernández no perdió esa sonrisa que conquista una y otra vez a sus incondicionales a pesar de los años. Su noche romántica seguía con 'No lo beses' o 'Qué voy a hacer con mi amor', entre otros temas que pasaron la medianoche del miércoles al jueves.

Todavía le quedaba carrete al cantante mexicano y llegó uno de los momentos más fuertes del concierto con 'Sé Que Te Duele', 'Te Voy a Perder' o el esperado por muchos 'Me Dediqué a Perderte', tema en el que se sentó en el banquillo al borde del escenario y creó un momento mágico con sus fans. Y de la reina de las baladas pasó a una de sus canciones con más baile 'Canta Corazón'.

Su voz fue de menos a más en el concierto y presumió de ella con tonos finales en muchos de los temas, como pasó con '¿Dónde Vas Tan Sola?'. Después llegó el momento de 'Y se me va la voz' para que luego Alejandro Fernández hiciera como que se despedía del público fuengiroleño. Pero de eso nada. Él iba a compensar la media hora de espera de sus fans y volvió al escenario cantando “Malagueña salerosa” con una voz imponente que llenó Marenostrum de aplausos del público de la tierra.

Eso fue cerca de las 0.45 horas de la madrugada y aún le quedó concierto hasta las 1.20 horas que se despidió del escenario de Fuengirola. Volvió a hacer un gran homenaje a su padre con temas como 'El Rey' o 'Volver, volver' y también se disculpó al cantar 'Mátalas, por la letra polémica contra las mujeres: “Sé que causa polémica pero os digo que sólo habla del amor. Con esta canción empecé a darme a conocer en España”, recordó y justificó el mexicano. También tuvo momento para el error, que al final lo convirtió en un momento de humor en el que sus fans le entendieron: gritó Madrid en lugar de decir Fuengirola: “La cagué, la cagué...”, pedía perdón Alejandro Fernández entre los aplausos del público.

Cerca de dos horas y media estuvo Alejandro Fernández poniendo al público de Fuengirola lo más romántico posible, además de pasional. Con sus letras, sus bailes, sus sonrisas y guiños a sus fans, Alejandro Fernández cautivó anoche a Marenostrum, que en la mañana del jueves le habrá costado madrugar un poco más de la cuenta. Pero escuchar la voz del cantante mexicano en directo tuvo su recompensa. "¡Si Dios quiere nos vemos en un año!", se despidió el cantante de Marenostrum.