El encuentro de Mercedes con Antonio Banderas: «Yo viví más de 30 años en su piso»
El actor regala un concierto en su teatro a 350 mayores de la provincia ya vacunados por el ejemplo que han dado durante la pandemia
No estaba previsto, pero la carta le llegó «un segundo» antes de empezar y quiso leerla. Era de Mercedes, de 83 años, aficionada al teatro ... y uno de los 350 mayores a los que Antonio Banderas había invitado al Soho CaixaBank para reconocerles su comportamiento ejemplar en pandemia. En esas líneas le decía que sería «un orgullo» poder hablar con él en persona porque hay algo que les une: «Vive usted en el piso sexto de calle Zegrí, número 2, donde yo he vivido más de 30 años». «Pues vamos a cumplir ese deseo y vamos a hablar con ella», dijo Banderas mientras se encaminaba hacia la butaca donde se sentaba Mercedes. «Tiene que venir a tomarse un café conmigo allí. Lo hemos cambiado un poquito, hemos tirado algunos muros», le comentaba Banderas entre risas. Y a Mercedes se le iluminaba la mirada a su lado.
Fue uno de los grandes momentos de una jornada emotiva y totalmente diferente a lo vivido hasta ahora en el Soho CaixaBank. Alrededor de 350 mayores de la provincia hicieron al teatro de Banderas su primera salida desde el inicio de esta crisis sanitaria tras haber completado la pauta de vacunación. Fueron de la mano -en muchos casos literalmente- de la Fundación Harena, que combate desde hace años la soledad de los ancianos en residencias y en sus hogares. «Los voluntarios nos cuentan que hay algunos que desde hace días no hablan de dolores ni de tristeza, sino de lo que se iban a poner hoy», contaba Angie Moreno, gerente de la fundación.
«Hacía mucho tiempo que no venía aquí», comentaba Carmen Viano, de 101 años, que buscaba en su memoria el nombre de los cines que había en ese mismo lugar donde ahora se levanta el Soho. Tenía «ganas» de teatro «y de ver a Antonio Banderas», apostilló. «Me lo quiero llevar a mi residencia para los que no han podido venir. Y pedirle un autógrafo», aseguraba apoyada en su andador. «Aunque no vea a Antonio, esto es lo más grande: he salido a la calle y he visto su teatro», se felicitaba Dolores Carrión, de 90 años, sentada ya en la butaca. Conchi Tendón, vecina de Algarrobo, reconocía que hasta subirse al coche le había dado «sentimiento». «Me encerré en marzo y no he salido hasta la vacuna», añadía. Y ya si se les preguntaba por cuándo fue la última vez que fueron a un teatro.... «¡Uy! Eso desde mozuela», respondía Remedios Muñoz.
Y así, 350 historias de resistencia, sacrificio y también optimismo. «Es para nosotros un orgullo tenerles aquí», declaró Banderas sobre el escenario, rodeado de los músicos de la Sinfónica Pop del Soho. El actor reivindicó «el valor terapéutico» del arte. «Hablo no solo como un intérprete que se sube a un escenario a actuar o se pone delante de una cámara; hablo también como paciente, como persona que en un momento dado he tenido que usar la música, la literatura, he tenido que tirar de películas para curarme, para aprender de nuevo a vivir, a relacionarme con los demás, a aprender el mundo en el que estoy viviendo», argumentó haciendo referencia al infarto que en 2017 lo cambió todo.
El evento 'El mayor aplauso', fruto de la unión de la Fundación Teatral Antonio Banderas, Fundación Harena y CaixaBank, contó con una amplia presencia institucional, encabezada por el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, acompañado por el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y el presidente de la Diputación, Francisco Salado; así como representantes de CaixaBank, principal patrocinador del teatro.
Tras las palabras, la música. Arturo Díez Boscovich tomó la batuta de la Sinfónica Pop para abrir el concierto con la fanfarria que él mismo compuso para el Soho CaixaBank. La banda sonora de un teatro que servía de anticipo a las partituras de 'Lo que el viento se llevó', 'Aladdin', 'Agente 007 contra el Dr.No' o 'Desayuno con diamantes'. Este fin de semana se repite el programa, ya para el público general. Un disfrute para los oídos del que se llevaron a casa no solo el recuerdo: a la salida le entregaron a todos una fotografía con Antonio Banderas desde el escenario a modo de 'selfie' que se había tomado al inicio del acto. Para que esta mañana no se olvide, aunque a veces falle la memoria.
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