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Vista del altar construido para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Cracovia. :: efe
La defensa que hará el Papa de los refugiados incomoda a Varsovia

La defensa que hará el Papa de los refugiados incomoda a Varsovia

Francisco celebrará la JMJ en la patria de Wojtyla y hablará ante unos obispos remisos a que comulguen los divorciados que se han vuelto a casar

COLPISA / AFP

Lunes, 25 de julio 2016, 00:34

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El papa Francisco inicia el miércoles su primera visita a Polonia, donde le espera una multitud festiva de jóvenes católicos de todo el mundo, a los que instará a acoger a los refugiados, un tema espinoso que incomoda hasta al episcopado polaco. Los recientes ataques en Múnich y Niza, y los que sufrieron París y Bruselas previamente, pesarán en la fiesta de los jóvenes católicos, la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que se celebrará bajo estrictas medidas de seguridad.

El pontífice latinoamericano, que pisa por primera vez la tierra de Juan Pablo II, visitará también el santuario mariano de Czestochowa y el campo de exterminio nazi de Auschwitz, «el lugar más terrible del mundo», como lo califica el rabino de Polonia Michael Schudrich. Allí orará en silencio por los 1,1 millones de personas, entre ellos un millón de judíos, que fueron exterminados por la Alemania nazi y se reunirá con un grupo de supervivientes.

También rezará en la celda de San Maximiliano Kolbe, el religioso franciscano que ofreció su vida para salvar a un padre de familia.

La JMJ, conocida como el Woodstock de los católicos, fue instituida por Juan Pablo II en 1986, y se celebra este año en Cracovia, la antigua capital real de Polonia. La edición de este año estará dedicada al tema de la misericordia, que para el Papa pasa también por acoger al forastero, al refugiado, un drama que actualmente sacude a Europa.

Para Francisco, hijo de inmigrantes italianos, se trata del drama que marca su pontificado debido a la llegada de miles de migrantes que huyen del hambre y la guerra en África y Medio Oriente al viejo continente. Su posición ha sido siempre clara: acoger, integrar. «Todos somos migrantes», clamó desde la isla griega de Lesbos, símbolo de ese drama.

Como ejemplo regresó con tres familias de musulmanes al Vaticano y ha pedido a todas las parroquias católicas en el mundo alojar a al menos una familia de refugiados.

Pese a los llamamientos del Papa y a las directivas de la Unión Europea, buena parte de la sociedad polaca, así como las autoridades, se niegan a aceptar refugiados. El Gobierno conservador y la primera ministra, Beata Szydlo, profundamente católicos, no quieren que Polonia reciba migrantes porque consideran que son una amenaza para la seguridad. Los obispos polacos, preocupados por las posturas del Papa sobre temas como el acceso a la comunión a los divorciados que se vuelven a casar en la exhortación 'Evangelii Gaudium', mantienen una cierta prudencia. «¿Sobre los refugiados? El Papa seguramente va hablar de ello», dijo el nuncio apostólico en Varsovia, el arzobispo Celestino Migliore.

La misma información se puede leer entre líneas en el discurso del Secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, durante la ceremonia en abril por el 1050 aniversario del bautismo de Polonia.

La estancia de Francisco en Cracovia, del 27 al 31 de julio, ha obligado a la ciudad a blindarse. Polonia ha movilizado a más de 40.000 efectivos de seguridad para proteger al papa Francisco. Las autoridades intentan calmar los ánimos desde hace semanas, indicando por un lado que no se ha señalado ningún riesgo de atentado y que, en cualquier caso, se está haciendo todo lo posible para impedir cualquier tipo de ataque.

Pero, tras el tiroteo de Múnich y el atentado de Niza, cualquier congregación de personas es potencialmente de alto riesgo. Además, el jefe de la Iglesia católica es probablemente un blanco potencial para los fanáticos religiosos islamistas. El intento de asesinato del papa Juan Pablo II en la plaza de San Pedro hace 35 años, a manos del turco Ali Agca, mostró que el pontífice se expone a los mismos riesgos que un líder político.

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