Luna: «La apuesta por el Pompidou y el centro ruso es muy rentable»

Y sí, ya había titular para resumir la charla de José María Luna en la sesión inaugural de la segunda edición de las Jornadas sobre Emprendimiento Cultural celebradas ayer y hoy en La Caja Blanca. Luna es director de la Fundación Picasso-Museo Casa Natal y el gestor designado por el Ayuntamiento de Málaga para coordinar la llegada a Málaga de las respectivas sedes del Centro Georges Pompidou y del Museo Estatal Ruso de San Petersburgo. Y más allá de la posibilidad de tener que imprimir semejante tarjeta de visita en papel continuo como él mismo bromeó ayer en esas responsabilidades se resume buena parte de la historia cultural reciente de los equipamientos culturales de titularidad pública en la capital malagueña.

Luna repasó en su ponencia aquellos años 80 en los que nacía la Casa Natal como centro de documentación y de apoyo a los artistas. Una entidad «que representa el caldo de cultivo de la oferta y de la dinámica cultural de Málaga en la actualidad», como defendió el gestor. Una institución que ayer mismo, en virtud del acuerdo en el pleno municipal celebrado en la Casona del Parque, se convertía en agencia pública municipal para poder asumir la gestión de las delegaciones del Pompidou en el Cubo del puerto y del centro ruso en Tabacalera.

Iniciativas cuya rentabilidad enarboló ayer Luna no sólo desde el punto de vista económico. «El turismo cultural es la principal industria de Málaga y esa es una industria contaminante desde el punto de vista económico, pero también artístico y cultural», comparó Luna, cuyas palabras servían de preámbulo a la primera visita oficial a Málaga del presidente del Centro Georges Pompidou, Alain Seban, que hoy tiene previsto presentar junto al alcalde, Francisco de la Torre, la imagen corporativa de la sede malagueña del Pompidou, al tiempo que ambos darán cuenta del estado del proyecto.

Más allá de las exposiciones

Una iniciativa que tendrá un presupuesto anual de 4,2 millones de euros, de los que tres millones saldrán de las arcas municipales, como recordó ayer Luna, quien esgrimió la repercusión de ambas actuaciones más allá de su oferta expositiva. «Tanto en el Pompidou como en el centro ruso pretendemos desarrollar una potente política de actividades culturales», avanzó, en alusión a los equipamientos llamados a inaugurarse en los primeros meses del año próximo.