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Un nuevo paseo por el patrimonio local

Un nuevo paseo por el patrimonio local

El museo municipal de Málaga, instalada junto a La Coracha, reorganiza su discurso, incorpora piezas y cambia su arquitectura interior

Antonio Javier López

Jueves, 22 de mayo 2014, 18:11

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Un murmullo de gritos infantiles baja por la escalera para desmentir que este sea un edificio vacío. La reapertura oficial todavía no se ha producido, pero en la práctica, el Museo del Patrimonio Municipal estrena desde la pasada Noche en Blanco un nuevo recorrido y un aspecto remozado. Apenas faltan los últimos detalles de la reforma emprendida en el edificio de La Coracha desde principios de enero. La reinauguración está prevista el 5 de junio; si bien, a modo de aperitivo, el director de la institución municipal Elías de Mateo, sirve de cicerone en este renovado paseo por el patrimonio local.

Planta baja

Nueva sala para las exposiciones temporales

Los borbones posan, reza el cartel que anuncia la exposición sobre las visitas reales a Málaga desde los tiempos de Isabel La Católica hasta la actualidad. Un montaje que también servirá para estrenar el nuevo espacio destinado a muestras temporales en el Museo del Patrimonio. La semblanza de Isabel II a cargo de Vicente López, las obras de Rafael Murillo sobre Alfonso XIII y la reina Victoria Eugenia o los retratos de gran formato de los actuales monarcas firmados por Félix Revello de Toro en 1991 sirven de adelanto del proyecto que también ofrecerá documentos, grabados y medallas conmemorativas.

Primera planta

El antiguo bar se transforma en aula didáctica

Pese a la magnífica panorámica de la ciudad que ofrece, las limitaciones técnicas han impedido que cuaje la cafetería del museo municipal, así que sus actuales responsables han decidido convertirla en una «sala polivalente» dedicada de manera preferente a la vertiente didáctica de la entidad. «En una de las paredes hemos colocado una pizarra que además sirve como pantalla para proyecciones y hemos creado un muro de corcho para poner los trabajos durante los talleres», avanza el director que en marzo cumplió un año al frente del museo.

Segunda planta

Los símbolos y la evolución de la ciudad hasta la modernidad

El director del Museo del Patrimonio Municipal explica que el anterior recorrido cronológico que planteaba la entidad en su colección se ha matizado con unidades temáticas que sirven de escalas en ese discurso temporal. Así, esta planta repasa los símbolos y la evolución urbana de la capital malagueña, las fiestas barrocas y el tránsito hacia la modernidad. El visitante encuentra en el primer apartado los cambios experimentados en el escudo municipal desde 1494 hasta el logotipo creado en 2005. Junto a la enseña, el pendón de la ciudad datado en 1759 y restaurado con el patrocinio de la Fundación Málaga se expone por primera vez al público, como reivindica De Mateo.

El Martirologio de Usuardo (año 858) destaca en la sección dedicada a las fiestas barrocas, mientras que el plano de la ciudad a cargo de Carrión de Mulas (1751) sigue erigiéndose como «una de las joyas de la colección municipal», en palabras del director del museo, que destaca el espacio a modo de capilla creado para contemplar otra de las piezas protagonistas en el patrimonio local: Los desposorios místicos de Santa Margarita (1527) de Il Parmigianino. En el apartado dedicado a la defensa de la ciudad luce asimismo un antiguo cañón procedente del Archivo Municipal, junto a una impresión de gran formato de la batalla frente a las costas de Málaga en 1704.

Tercera planta

El mar, un gabinete burgués y las fiestas en la Belle Epoque

Donde antes había paisajes diversos ahora reina el mar. El director del Museo del Patrimonio ha decidido dedicar a este asunto la primera sala de la tercera planta. Ahí se reúnen Marina (1922) de Verdugo Landi, procedente de Alcaldía; Restos del naufragio (1884) de Carlos de Haes; Una moraga (1879) de Horacio Lengo, un crepúsculo firmado por Emilio Ocón y Muelle del Puerto de Málaga 1887), obra de José Gartner de la Peña y perteneciente a la colección de la Academia de Bellas Artes de San Telmo.

La napolitana de Enrique Simonet también procedente de Alcaldía se estrena asimismo en las salas del museo y preside el espacio dedicado a la primera colección municipal, que da paso a El alegato (1881) de Ferrándiz, como puente hacia el «gabinete burgués» recreado en las salas del museo con cinco bodegones florales. Como fin del recorrido por la tercer planta, la antigua sala de exposiciones temporales acoge un conjunto de carteles bajo el epígrafe Los festejos durante la Belle Époque.

Cuarta planta

Pimentel y Guerra se suman al recorrido por el arte actual

Jaime Pimentel y Evaristo Guerra se unen al recorrido del Museo del Patrimonio Municipal por el arte de las últimas décadas con la escultura Adán nace (1978) y el lienzo titulado Mandarino (2008). La llamada Generación del 50 (Brinkmann, Barbadillo, Chicano, Alberca, Hernández...) convive con una nueva exhibición de la escultura contemporánea con obras de Pablo Alonso Herráiz, Stefan, Elena Laverón, José Seguiri o Francisco Jurado.

Sigue el eco de voces infantiles. Son alumnos del colegio La Biznaga en un taller didáctico... y eso merece un paseo aparte.

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