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Martes, 28 de julio 2020, 15:39
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Peleó hasta el final, pero Ángel Ruiz, el joven malagueño que padecía neurofibromatosis de tipo 2, una enfermedad rara diagnosticada a una de cada 60.000 personas, ha sido enterrado a los 26 años. Su trastorno está caracterizado por el crecimiento de tumores que pueden llegar a oprimir nervios hasta alterar algunas funciones básicas. Los suyos eran «como pelotas de tenis» que le provocaron parálisis facial en el lado derecho y pérdida de audición. Nunca se rindió. Pese a los problemas causados por la enfermedad, aprobó Selectividad y se matriculó en Historia. Pero los tumores siguieron creciendo cerca del tronco encefálico hasta originar también deficiencias en la visión y el equilibrio. En agosto volvió a ser ingresado en el Hospital Regional. Murió el sábado.
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Su familia lo recordará como «un luchador nato» apasionado por el ciclismo, empeñado en subir por sí mismo las escaleras del hospital aunque cada escalón requiriese un esfuerzo titánico. Su ilusión era volver a montar en bicicleta. Fue intervenido en varias ocasiones, pero sólo pudieron extirpar parte de algunos tumores. Sus padres reclamaron durante meses que le aplicaran un novedoso tratamiento con Bevacizumab, un fármaco que ha demostrado su eficacia en algunos cánceres, como colon o mama, y cuya aplicación está siendo estudiada para otras patologías tumorales. La familia defendía que hay estudios clínicos que prueban su eficacia en la neurofibromatosis, con una probabilidad de que los tumores disminuyan superior al cuarenta por ciento: «Pero al tratarse de una enfermedad rara su tratamiento no está homologado en el prospecto del fármaco». Desde el hospital, sin embargo, alegaban que de momento no había podido prescribirse este medicamento al estar en fase de investigación. Este lunes tenían una cita con Oncología para estudiar el caso.
Ángel fue enterrado el domingo en el cementerio de Torremolinos. Su féretro hizo el mismo camino que solía hacer él cuando quería darse un baño. Por deseo de la familia sonó Knockin' on heaven's door, de Bob Dylan, versionada por Guns N' Roses.
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