Rincón de la Victoria paga 1,5 millones por una parcela de 2.730 metros cuadrados en primera línea de playa

Una parcela anexa, de una superficie similar, y que se usa como aparcamientos, el conocido como Llano de Baluma, ya fue expropiada por el Consistorio rinconero hace tres décadas, en un procedimiento que no se finalizó hasta hace apenas cinco años. Aquella operación salió mucho más costosa para las arcas municipales, ya que al casi millón de euros en que se tasaron los terrenos, hubo que sumar sendos pagos de intereses por una cantidad muy similar.

Con este precedente, el equipo de gobierno tripartito (PP, Cs y PMP) ha optado por firmar este viernes el acta de ocupación y pago de la parcela de la propiedad de la sociedad Baluma Beach, cuyos administradores son Carlos Cazorla y José Luis Repullo. Según han informado desde el Consistorio, una vez que el Ayuntamiento se ha hecho con los terrenos, se procederá a llevar a cabo «un proyecto como zona de equipamiento y esparcimiento para el disfrute de los vecinos de La Cala del Moral».

La parcela está junto al paseo marítimo próxima a la playa de Calaflores. En el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) estos suelos están calificados como de equipamientos, a obtener mediante un proceso de expropiación. Repullo ha explicado a SUR que a mediados de los años noventa vendió los terrenos a la sociedad Rumasa, del empresario ya fallecido José María Ruiz Mateos, quien firmó un convenio con el Consistorio para promover allí un hotel, recalificando el suelo.

Sin embargo, el proyecto se frustró por la crisis de 2008. Tras la quiebra de la firma, Repullo consiguió recomprar los terrenos en un procedimiento concursal. Desde entonces, ha tratado sin éxito de conseguir la recalificación del suelo para el proyecto hotelero. Puesto que no lo consiguió, en diciembre de 2019 solicitó la expropiación al Ayuntamiento, conforme al planeamiento en vigor.

El pasado noviembre, la Comisión Provincial de Expropiaciones, dependiente de la Junta de Andalucía, tasó el suelo en 1.362.000 euros, a los que se sumarán 100.000 euros en intereses. El empresario, que es además artista plástico, ha apuntado que el Ayuntamiento ha aceptado esta tasación, por lo que se ha procedido a la firma del acta de ocupación. Sin embargo, él y su socio han valorado el suelo en 7,5 millones de euros, por lo que han interpuesto un recurso contencioso-administrativo para reclamar el pago de la diferencia en la vía judicial.