La Junta defiende un pasaporte sanitario para cualquier extranjero que viaje a España
El vicepresidente y el consejero de Salud reclaman al Gobierno que vigile el cumplimiento de la cuarentena de 14 días en los inmigrantes irregulares
El vicepresidente de la Junta y consejero de Turismo, Justicia y Administración Local, Juan Marín, defiende un sistema de tarjeta o pasaporte sanitario que garantice ... que no padecen coronavirus los extranjeros que viajen a España, tanto turistas que vengan a veranear en este país como los inmigrantes europeos de paso por España.
Marín ha hecho esta propuesta ante varias preguntas de los periodistas sobre la Operación Paso del Estrecho en una comparecencia con el consejero de Salud, Jesús Aguirre, tras la reunión del comité de crisis. El Gobierno andaluz pasó de pedir que se suspenda a ofrecer colaboración sanitaria a este operativo de tres décadas para auxiliar a los emigrantes norteafricanos en Europa que viajan a sus países de origen a pasar las vacaciones estivales. Aún así, Marín y Aguirre insisten en la necesidad de «protocolos» que garanticen la seguridad sanitaria, tratándose de un flujo de 3,5 millones de personas en la ida y vuelta desde Europa a Marruecos a través de los puertos andaluces, el 80% en los de Algeciras y Tarifa.
En este contexto, y ante las acusaciones de racismo de la oposición de izquierdas por diferenciar a extranjeros turistas de emigrantes, Marín ha lanzado la propuesta de que el Gobierno de España y los del resto de Europa deben ponerse de acuerdo para habilitar «un corredor verde y limpio» para mediante un «pasaporte o tarjeta sanitaria» de las personas extranjeras, «sean turistas o no», viajen sin ser portadoras o transmisoras del virus.
Marín recuerda que muchos viajeros a determinados países deben vacunarse previamente de posibles virus que puedan contraer a los lugares que van. Con este símil, el vicepresidente andaluz anota que para el caso de las llegadas de extranjeros están los test y los controles de temperatura.
«El movimiento de tres millones de personas tiene que tener todas las garantías, no hacemos diferencias entre turistas o migrantes», ha insistido para anotar que la dificultad de la OPE estriba en el cierre de fronteras de Marruecos y también de la mayoría de los 23 países europeos desde los que provienen los usuarios de este operativo.
Marín utilizó el ejemplo de los test para remarcar que la realización de una prueba PCR es la oferta que él hizo al Gobierno de Marruecos para que dejen regresar a su tierra a las 7.000 temporeras de la fresa en Huelva a las que se les acaba el contrato y quieren volver con su familia. El reino alauita ha prorrogado el estado de alarma y cierre de fronteras hasta el día 10 de julio. El Ministerio de Asuntos Exteriores de España, tras intensas gestiones de la Junta de Andalucía a través de Marín y la directora general de Políticas Migratorias, Mar Ahumada, ha ampliado el permiso de estancia laboral de las mujeres hasta el 30 de junio.
Unas gestiones que han logrado que ayer saliera un grupo de siete mujeres y cinco bebés a Marruecos en un vuelo fletado desde Málaga por este país para repatriar a sus ciudadanos retenidos durante el confinamiento en España.
El regreso
Marín pide al Gobierno que inste al de Marruecos para el regreso de estas mujeres cuanto antes y no se quede «dormido» como, en su opinión, pasa con la gestión de la operación Paso del Estrecho. En la misma comparecencia, el vicepresidente reclamó al Ejecutivo que vigile el cumplimiento de la cuarentena de 14 días a los inmigrantes irregulares que llegan en pateras a las costas andaluzas, ya que se han detectado positivos del coronavirus (37 de 800 personas).
El vicepresidente, y también el consejero de Salud, Jesús Aguirre, reclaman que el Gobierno habilite alojamientos para que puedan pasar los 14 días ya que la policía solo puede retenerles 72 horas y luego pasan a ser atendidos por las ONG, que es «como dejarles en la calle», con lo que eso implica si alguno está contagiado y no se ha detectado, anotó. «Estamos hablando de un tema de salud pública», añade Jesús Aguirre.
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