Investigan como violencia machista la muerte de una mujer en su casa de Cartaya

Una mujer de 54 años fue encontrada muerta ayer en su domicilio en la localidad onubense de Cartaya en un episodio que la Guardia Civil está investigando como un posible caso de violencia machista.

El cuerpo sin vida de la mujer fue hallado por un albañil que tenía previsto hacer obras en la casa de la víctima, de la que fue pareja con anterioridad, aunque la Guardia Civil centra su investigación en el hombre con el que convivía la víctima y que está en búsqueda para su detención.

El albañil había sido pareja de la mujer y tenía antecedentes de violencia hacia ella, por lo que la mujer había estado incluida en el sistema VioGén de seguimiento a las víctimas de violencia de género hasta el año pasado, según el alcalde Cartaya, Manuel Barroso.

El albañil que descubrió el cadáver es, por el momento, testigo aunque los investigadores no descartan ninguna hipótesis. Los primeros datos de la investigación apuntan a que la mujer fue asesinada de un golpe en la cabeza con objeto contundente, posiblemente un martillo que se encontraba en la vivienda que era objeto de una obras de reforma.

Según confirmó ayer el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, la última pareja con la que estaba la víctima no estaba registrada en el sistema VioGén, como así lo estaba con la anterior relación.

El delegado del Gobierno señaló que «en la investigación se está interrogando a las personas que estuvieron hasta última hora de la noche con la mujer fallecida de manera violenta y también se están revisando todos los elementos de cámaras y demás que había en el entorno, incluso en la propia vivienda, para a partir de ahí clarificar qué es lo que ha podido pasar con esta mujer, por lo que en este momento todas las hipótesis están abiertas y no podemos descartar ninguna de ellas», precisó.

El alcalde de Cartaya añadió además que «hay un testigo que vio unas mantas tiradas, que supuestamente son de la persona que salió de la vivienda» para probablemente tapar su rostro una vez perpetrado el asesinato.

Manuel Barroso confesó encontrare «en estado de shock» y trasladó «el profundo pesar» de la Corporación Municipal a los familiares y amigos de la víctima y «la gran consternación que el dramático suceso ha provocado en la localidad por las trágicas circunstancias en las que se ha producido el fallecimiento de esta vecina de Cartaya», subrayó.

El Ayuntamiento de Cartaya ha decretado un día de luto oficial y las banderas del municipio ondearán a media asta en memoria de la vecina asesinada en circunstancias violentas. Además, el Ayuntamiento ha convocado hoy una concentración con un minuto de silencio a las puertas de la casa consistorial.