De la Torre y Bendodo, dos formas de encarar el IBI

Cabe recordar que durante cinco años el Ayuntamiento de Málaga bonificó las subidas del IBI por lo que los malagueños no lo notaron en el bolsillo, hasta este 2013. Después de algunas negaciones iniciales, el equipo de gobierno popular en la Casona del Parque reconoció que el impuesto había subido para el 60% de las viviendas de la capital con subidas de hasta el 40%.

En plena polémica por el 'catastrazo', De la Torre llegó a asegurar que no tenía medidas para evitar la subida y rechazó en el pleno una petición del PSOE para pedir a la Dirección General del Catastro que revisará los valores de las viviendas de 2008, cuando la crisis no había erosionado los precios de las viviendas.

Apenas un par de semanas después de la polémica y la indignación ciudadana, Elías Bendodo aprovechó el recuperado debate sobre el estado de la provincia para anunciar que la Diputación bonificará en 2014 el IBI a cien mil hogares malagueños -se beneficiará medio millón de personas-.

Una maniobra política en la que Bendodo mató dos pájaros de un tiro: de un lado desarboló a los grupos de la oposición de izquierdas en la Diputación y, de otro, dejó en una difícil posición al alcalde de la capital.

Y todo ello, en un contexto político en el que, a pesar de que Elías Bendodo, como presidente provincial del PP, ha defendido y propuesto que Francisco de la Torre como candidato del partido a la Alcaldía en las municipales de 2015, late el debate de la futura sucesión del alcalde de Málaga, una carrera en la que el presidente de la Diputación parte como el gran favorito para ocupar el sillón de la Casona del Parque.