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MÁLAGA

Un juez ordena investigar a una mujer por denuncia falsa contra su marido

Absuelve al hombre, que había sido acusado de insultos, amenazas de muerte y de impedirle entrar en la vivienda que ambos compartían La sentencia califica de «maniobra torticera» la conducta de la denunciante

MONTSE MARTÍN

Miércoles, 18 de noviembre 2009, 14:01

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Un juez ha ordenado investigar a una mujer al existir indicios de que denunció falsamente a su marido y mintió en el juicio. En la sentencia absuelve al hombre que había sido acusado de coaccionar, insultar y amenazar de muerte a su pareja y califica la conducta de ésta de «maniobra torticera», de «tal claridad» que el fiscal retiró la acción penal. La resolución del Juzgado de lo Penal número 11 de Málaga, a la que ha tenido acceso SUR, dicta un fallo absolutorio contra el procesado y ordena que se deduzca testimonio para su remisión al juez decano por entender que la mujer pudo incurrir en delitos de denuncia falsa y falso testimonio.

Los hechos se remontan al pasado mes de octubre cuando la mujer denunció a su marido por amenazarla de muerte, insultarla y coaccionarla para impedirle la entrada a la vivienda. El juzgado de violencia de género abrió diligencias y el hombre fue acusado y posteriormente juzgado.

La sentencia declara probado que cuando el hombre se encontraba en la casa en compañía de sus dos hijas menores, la mujer llegó a la puerta de la vivienda y al encontrarse con él dentro introdujo la llave desde fuera para impedir que saliera, al tiempo que indicaba a uno de sus hijos que avisara a la Policía Local. Sobre las cuatro de la tarde se personó una patrulla en la puerta del domicilio y los agentes encontraron a la mujer y «muy alterada» tanto con su marido como con los propios policías locales. Según la sentencia, «la pareja se enzarzó en una discusión sin mayores consecuencias» y los agentes invitaron a la mujer a que pusiera una denuncia, lo que hizo al final.

La resolución añade que «no ha existido delito alguno» y que tanto la denunciante como el denunciado «tenían disponibilidad sobre la vivienda y ninguno podía excluir al otro de la entrada en ella, sin que conste que el marido la coaccionara para impedirle entrar, ni que profiriera expresiones amenazantes ni vejatorias contra la mujer», tal y como ella reflejó en su denuncia.

Para dictar el fallo absolutorio, el juez se apoya en la declaración de los policías locales que se personaron en el domicilio. Éstos declararon en el juicio que la mujer no les comentó nada del incidente (los insultos, las amenazas de muerte) ni tampoco sus hijos, y que su comportamiento con ellos fue «hostil» y «agresivo» frente al «educado y tranquilo» del hombre. Los policías manifestaron que consultaron si pesaba una orden de alejamiento sobre el hombre, pero que «no había nada pendiente», y que entonces la invitaron a presentar denuncia y se marcharon. Según el testimonio de una de las hijas de la pareja, tras este incidente, la mujer se marchó y llegó más tarde a casa y que, «riéndose», les enseñó la denuncia que tenía en la mano.

El juez añade que si el denunciado hubiera proferido las expresiones vejatorias y amenazantes «es lógico que hubieran sido comentadas por la mujer a los agentes y si no lo hizo es porque no acontecieron». Por último, en su sentencia recuerda que «la claridad de la maniobra torticera fue tal que el Ministerio Fiscal actuando en defensa de la legalidad retiró la acción penal» contra el hombre acusado.

«Cambiar la ley»

El letrado defensor del hombre absuelto, José Ignacio Francés, del despacho IFS Abogados, se mostró satisfecho por la sentencia: «Es verdaderamente complicado obtener una deducción de testimonio en una denuncia por malos tratos porque en la mayoría de los casos el denunciado es culpable mientras no se demuestre lo contrario. Mi cliente ha estado cuatro veces en un calabozo sin tener una sentencia condenatoria. Hay que cambiar la ley».

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