TIEMPO PASADO: Los hermanos Sawa y Málaga

Una autoridad de la provincia de Ciudad Real no dudó en decir en un acto cultural lo siguiente: «Felicitamos al gran escritor cordobés Antonio Gala, nacido en Brazatortas». Ricardo León no nació en Málaga, como habitualmente se ha dicho. Hijo de un militar, quedó huérfano, y niño aún se trasladó a la ciudad andaluza, donde cursó el bachillerato. Se dedicó al periodismo y frecuentó las tertulias malagueñas, considerando esta localidad como su auténtica patria chica. Ello motivó que historiadores del prestigio de Ángel Valbuena Prat, en su acreditada 'Historia de la literatura española', lo considere malagueño de nacimiento. Muy acertadamente, Cristóbal Cuevas no lo incluye en su 'Diccionario de escritores de Málaga y de su provincia'.

Sin la importancia concedida a Ricardo León, hemos de considerar que el escritor bohemio por excelencia, Alejandro Sawa, ha sido considerado también malagueño por prestigiosas publicaciones como la 'Gran enciclopedia Larousse'. Quizás contribuyera a eso el hecho de que, tras una primera vocación religiosa, ingresó en el Seminario de Málaga. Sin embargo, los estudios de Alonso Zamora Vicente, Javier Membra y Francisco Arias Solís, entre otros destacados historiadores y críticos, han precisado Sevilla como su lugar de nacimiento. También se ha especulado respecto a sus dos hermanos menores, Miguel y Enrique. Miguel nació en Sevilla en 1867; Enrique, en Málaga, 1870, como corroboran los tratadistas citados y Juan Manuel González Martel, en 'La amistad de Alejandro Sawa y Ramón del Valle Inclán en el archivo de los Sawa'.

Enrique Sawa estuvo muy unido a sus hermanos, sobre todo a Miguel, quien en 1896 dirigía el semanario político satírico 'Don Quijote', en el que colaboraba el menor de los Sawa. Miguel participó activamente en publicaciones periódicas y en los ambientes de letras y políticos que frecuentaron sus hermanos. Él vivió los últimos años de su hermano mayor, Alejandro, en Madrid, que fueron los más dolorosos y difíciles. Aunque Miguel y Enrique quisieron ayudarle, Alejandro se hundió en la miseria, la locura y la muerte, el 3 de marzo de 1909.