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José Manuel Ramírez.
José Manuel Ramírez: «Los recortes son un atentado contra los derechos de los más vulnerables»

José Manuel Ramírez: «Los recortes son un atentado contra los derechos de los más vulnerables»

Profesor de la UMA y autor de una treintena de libros, este zaragozano afincado en Málaga desde hace 25 años es una de las voces más críticas con las políticas sociales en España

Antonio Ortín

Sábado, 24 de enero 2015, 02:00

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Se ha convertido en el aguijón de los que gobiernan. No en vano, preside la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales; el lobby que azota constantemente la conciencia de las administraciones en su empeño por ajustar el cinturón del Estado del Bienestar hasta la asfixia. «Si el ministerio pudiera tapar alguna boca dentro del sector, la mía sería una de las cinco primeras». José Manuel Ramírez (Villanueva de Huerva, Zaragoza, 1962), aterrizó en Málaga hace un cuarto de siglo. Fue por amor. Literalmente. La que hoy es mujer asistía en 1990 a un curso de verano de la Universidad de la Axarquía del que él era ponente. Acudía de hecho como uno de los expertos que a mediados de los ochenta había diseñado para el segundo Gobierno de Felipe González la primera red de servicios sociales que España desarrollaría en democracia. De aquel encuentro casual enVélez-Málaga se abrió la puerta de un destino («uno es de donde encuentra el amor», dice) que le hizo instalarse en Málaga como funcionario y profesor de la Facultad de Trabajo Social de la UMA. Autor de 27 libros, socio del Málaga («menos cuando juega el Zaragoza») y devoto de una cerveza frente al mar en Pedregalejo, preside el Observatorio Estatal de la Dependencia, a cuyo frenazo asiste con preocupación. «Y no es para menos. Los últimos datos del propio Gobierno revelan que 117.000 dependientes han muerto en los últimos tres años en lista de espera para ser atendidos».

Demoledor. Tengo la impresión de que, como con la conciliación, nos engañaron cuando nos prometieron un sistema de dependencia.

La Ley de la Dependencia es el mayor avance que ha habido en España en protección social en los últimos tres lustros. Es cierto que nos hubiera gustado que la financiación hubiese estado enmarcada en la Seguridad Social cuando la ley se aprueba en 2006. Pero eso no puede ser una excusa para justificar el recorte brutal y desalmado que ha generado el Gobierno de Rajoy. Es una batalla que estamos perdiendo.

¿O sea, para usted los recortes en dependencia tienen el sello de Rajoy?

Si es que él mismo lo anunció poco antes de llegar al Gobierno en 2011. «La Ley de Dependencia es insostenible». Esas fueron sus palabras textuales, con lo que se puede decir que, desgraciadamente, es la única promesa que ha cumplido. Dicho esto, en su primera semana en La Moncloa quitó el derecho a los moderados y lo dejó en suspenso hasta julio de 2015. Además, en sus primeros presupuestos recortó en 285 millones de euros la aportación del Estado a la dependencia. Y no hay que olvidar que también suprimió la cotización a la Seguridad Social de 170.000 cuidadoras y la prestación del 15% para este colectivo.

Y puso el broche con la suspensión de la dependencia durante dos años.

Esa fue la medida más dura. Piense usted que el 54% de las personas dependientes tienen más de 80 años. No pueden esperar.

Dicen de usted que es el azote de ministros y consejeros de asuntos sociales .

Ni los discapacitados, ni los enfermos de alzhéimer, ni los padres de hijos grandes dependientes; ni tampoco los enfermos mentales (que son los grandes olvidados de este país) pueden salir a la calle a defender sus derechos. Somos otros los que debemos comprometernos desde la ética profesional y por imperativo ciudadano. Porque para mí no se trata de recortes, sino de un atentado contra los derechos humanos de los más vulnerables.

¿Le daría usted alguna receta a los políticos para evitar que se nos caiga la red de protección social?

Si hay alguna receta, que no lo sé, es la de mirar el rostro humano de la gente que sufre. Y si lo que tenemos enfrente es un político sin alma, que saque la calculadora. Y verá que puede haber retornos económicos de invertir en dependencia.

¿Habla usted de rentabilidad?

Mire: por cada millón de euros invertidos, la dependencia genera treinta empleos tanto directos como indirectos. En la obra pública esa proporción es de 17 empleos.

No sería mala idea un plan ZP con la dependencia.

Es que si Zapatero hubiera invertido en dependencia habría generado más trabajos que con aquel plan que nos levantó las aceras.

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