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Imagen de archivo de la fiesta del Orgullo Gay celebrada en Torremolinos el año pasado.
El turismo gay se prepara para el mejor verano de su historia con cuatro grandes eventos en Málaga

El turismo gay se prepara para el mejor verano de su historia con cuatro grandes eventos en Málaga

El Orgullo Gay, el festival ‘Wonder Beach’, el encuentro de ‘osos’ Mad Bear y la visita del mayor crucero gay de Europa llenarán los negocios de Torremolinos

Iván Gelibter

Lunes, 2 de mayo 2016, 00:32

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A cualquiera que haya sido un habitual de las noches de Torremolinos y sobre todo de la Nogalera en las noches de verano de los últimos años, no le sorprende esa desagradable decepción del turista gay, que atraído por el nombre que el pueblo tiene en el colectivo español y europeo, apostaba el todo por el todo en unas vacaciones de las que no se iban contentos. La falta de actividades, eventos e infraestructura turística específica, fruto de la ausencia de apoyo institucional y en muchas ocasiones incluso palos en las ruedas de los empresarios eran una buena razón para no regresar a Torremolinos otro verano, y elegir opciones como Sitges e incluso Ibiza.

Sin embargo, esta tendencia autodestructiva del Ayuntamiento dio un evidente vuelco con el cambio del equipo de Gobierno, que vio en el turismo LGTB (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales), una oportunidad de negocio turístico, y que a la larga podría comenzar a conseguir el mantra más deseado por todos, la desestacionalización del sector. Aunque esto último se plantea como algo a medio o largo plazo, lo cierto es que esta apuesta del Consistorio, unida a la iniciativa privada tanto local como nacional ha conseguido que el municipio se prepare para el mejor verano de su historia, no solo por la proliferación de grandes eventos, sino por lo que esto va a significar en términos económicos y en puestos de trabajo directos e indirectos. El Orgullo Gay, que tendrá lugar entre los días 2 al 5 de junio; el festival de música y ocio Wonder Beach, del 5 al 10 de julio; el encuentro internacional de osos Mad Bear, en el mes de agosto; y la visita al Puerto de Málaga de La Demence el mayor crucero gay de Europa el 11 de julio, con autobuses fletados a Torremolinos, componen las cuatro grandes actividades sobre las que girarán los meses estivales, y que prometen poner en el centro de este segmento a la localidad de la Costa del Sol.

Antonio Domínguez, propietario de varios negocios en la Nogalera y en la playa del Bajondillo, es además el presidente de ACOGAT (Asociación de Comerciantes Gays de Torremolinos), y desde su participación en varios de estos eventos, hace un cálculo de qué puede significar este movimiento para la economía del municipio. «Es cierto que habrá cuatro grandes eventos, pero esto va a repercutir en todo el tejido empresarial de Torremolinos durante los meses de verano», asegura.

1.000 empleos directos

Lo que Domínguez sí se atreve a cuantificar es el significado en términos de empleo. Según el portavoz de los empresarios gays, el flujo de visitantes permitirá que los locales puedan contratar hasta 1.000 personas de manera directa «solo en el sector gay». A su juicio, el empleo indirecto derivado de este aumento del turismo puede ser toda una «revolución» en Torremolinos desde el momento que empiece el Orgullo Gay».

«Con estos datos», añade, «calculamos que nuestro beneficio podría aumentar en torno a un 50 por ciento más que en el año 2015», un verano, por cierto, que ya fue especialmente positivo para el sector. Y, ¿cómo se ha podido llegar a estas previsiones en tan solo un año? El análisis de Antonio Domínguez es claro. «La colaboración del Ayuntamiento con los empresarios de la Nogalera y del sector gay es fluido, y ellos están apostando por algo que el anterior equipo de Gobierno tenía totalmente marginado. Torremolinos ya tenía un nombre a nivel nacional e internacional, solo había que aprovecharlo», explica.

El alcalde de Torremolinos, José Ortiz, tiene claro también que para ser un destino gay friendly, no solo vale la fama, sino que es necesario construir una oferta que empiece desde los empresarios hasta la administración. Para ello, es fundamental adecuar una serie de negocios que rechacen de plano la discriminación y que adapten su oferta al público objetivo. «Y para llegar a ese fin tenemos que poner en marcha entre todos, asociaciones, empresarios y Ayuntamiento, una política de promoción para posicionar esta oferta en el mercado de turismo gay», señala.

«Tenemos un relato, unas raíces, un pasado reciente; y en eso, el turismo y especialmente todo lo que tenga que ver con LGTB juega un papel importante, porque viene de nuestra historia, está en nuestros genes», añade Ortiz, que recuerda que el pasado año, con motivo del Día del Orgullo LGTB, por primera vez en la historia, el Ayuntamiento de Torremolinos colgó en su balcón principal la bandera arcoíris. «Un hecho histórico que además contó con 12.000 personas en la primera manifestación por una Igualdad real en Torremolinos, convirtiéndose además en el primer Pride LGBT de la provincia, acompañado de actividades culturales, lúdicas y festivas», un evento que este año repetirán, y además ampliarán.

Esta corriente no solo está afectado al mundo empresarial local. El director del Wonder Beach, Pedro Serrano, asegura que el Ayuntamiento está trabajando «mano a mano» con ellos, facilitando la organización del festival en el Palacio de Congresos. «Queremos hacer este evento todos los veranos y alguno más en invierno», declara el empresario.

Torremolinos se prepara para el mejor verano de su historia. Los negocios ingresarán más, habrá trabajo, y la ciudad recuperará la esencia de lo que una vez fue. Y lo mejor de todo, es que eso ocurrirá mientras se disfruta de un verano de diversión.

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