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Diez consejos en caso de gastroenteritis

Diez consejos en caso de gastroenteritis

Los síntomas habituales de esta enfermedad, que dura unos pocos días, son diarrea, vómitos, fiebre y dolor abdominal. Pero se podría complicar en caso de deshidratación

redacción

Martes, 16 de febrero 2016, 15:40

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En invierno aumentan los casos de gastroenteritis vírica, una inflamación del estómago producida por un virus (rotavirus o norovirus), que afectan las funciones del intestino. Sus síntomas son diarrea, vómitos, fiebre y dolor abdominal, llegando a provocar el rechazo de alimentos y líquidos durante varios días, y eso puede producir deshidratación.

Desde antes incluso de padecer estos síntomas y hasta unos días después de recuperarse, la persona infectada puede transmitir a otras el virus, que está presente en sus deposiciones y vómitos, afirma Aurora Garre, experta médico de Laboratorios Cinfa. Aunque los síntomas duran normalmente de uno a tres días y luego la afección suele desaparecer por sí sola, durante el periodo en que se sufren todas estas molestias, el organismo es prácticamente incapaz de tolerar ningún alimento. Por esta razón, el tratamiento del paciente debe centrarse, sobre todo, en ingerir líquidos para evitar esa deshidratación y extremar las medidas de higiene para evitar trasmitir el virus en nuestro entorno cercano.

Los diez consejos de la experta, en caso de contraer la enfermedad son:

1. Hidratación. Durante los episodios más agudos de la enfermedad, hay que asegurarse de reponer los líquidos y sales que estás perdiendo bebiendo muchos líquidos (agua con limón, bebidas isotónicas o para deportistas, infusiones, zumos sin pulpa), pero en pequeñas cantidades y cada 30-60 minutos; beber demasiado de golpe puede provocarte nuevos vómitos. Consulta a tu farmacéutico la posibilidad de tomar soluciones de rehidratación oral.

2. Consumir solo ciertos alimentos. Durante la fase de diarrea, hacer una dieta específica como té o infusión para desayunar o merendar; arroz cocido y pechuga de pollo a la plancha para comer; y sopa de pasta, merluza hervida o jamón cocido para cenar.

3. Comer alimentos aliados. Algunas frutas como el membrillo, la manzana (pelada y rallada) y el níspero son muy recomendables durante la fase de recuperación de la enfermedad, pues gracias a su composición rica en taninos y pectina, poseen propiedades astringentes. Durante la fase aguda no utilices leche, es preferible recurrir a los yogures.

4. Lavarse las manos a menudo. Para no contagiar a otras personas, hay que hacerlo después de ir al baño o tras cambiar pañales. El lavado debe ser cuidadoso con agua tibia y jabón o, en su defecto, con alguna solución a base de alcohol, durante al menos quince segundos.

5. Manipular y conservar bien los alimentos. Cualquier alimento que se sirve crudo o que se manipula de manera inadecuada puede contaminarse con norovirus. Por eso, lava y enjuaga bien las verduras de hojas verdes, como la lechuga o la espinaca, las frutas frescas y los moluscos vivos.

6. Aumentar la limpieza en la cocina. Realizar una limpieza escrupulosa de los cubiertos, utensilios de cocina y superficies, especialmente tras un episodio de vómitos o diarrea, para mantener a los virus causantes de la gastroenteritis lejos del organismo.

7. No tomar antibióticos. En el caso de la gastroenteritis vírica, es decir, causada por virus y no por bacterias, los antibióticos resultan totalmente inútiles. No existe medicación específica para esta afección; en todo caso, puede ser necesario tomar analgésicos o antieméticos para tratar posibles síntomas como los vómitos o la fiebre.

8. No usar medicamenteos contra la diarrea. Nunca se deben suministrar a los niños, sin la prescripción médica, ya que puede alargar la infección. A las personas que toman diuréticos y desarrollan diarrea, el médico les puede recomendar suspender el consumo de estos medicamentos durante un episodio agudo.

9. Reconocer los síntomas de la deshidratación: Piel seca y arrugada; irritabilidad o confusión; mareos o aturdimiento; latidos cardíacos y respiración rápidos, principalmente. En caso de notar estos síntomas, acudir al médico. En caso de que el paciente sea un bebé o un niño pequeño se debe supervisar el número de pañales mojados cambiados al día cuando su hijo está enfermo.

10. Acudir al médico si el proceso no remite. Los síntomas asociados a la gastroenteritis suelen desaparecer por sí solos al cabo de entre uno y tres días, aunque pueden llegar a durar hasta quince. Si pasado ese tiempo continúan las molestias hay que acudir al especialista y consultarle antes de dejar de tomar cualquier medicamento prescrito anteriormente a caer enfermo.

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