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Trucos para desconectar en vacaciones

Trucos para desconectar en vacaciones

Cinco consejos para que cuerpo y mente descansen durante el verano

redacción

Lunes, 17 de agosto 2015, 15:24

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Para descansar y disfrutar verdaderamente de las vacaciones de verano, hace falta seguir algunos consejos que buscan que exista una desconexión mental del trabajo. Aunque parezca difícil borrar de la cabeza las labores cotidianas y no mirar el correo electrónico cada media hora, el reto comienza antes del primer día de asueto. «Muchos no consiguen que su cuerpo y su mente estén dónde tienen que estar», afirma el psicólogo Alberto Barrios, experto del Colegio de Psicología de Bizkaia. «Cuando están trabajando, quieren organizar las vacaciones; y cuando están de vacaciones, pretenden organizar el trabajo y hacer lo que no se ha hecho durante la jornada laboral. A veces es un tema de desubicación».

Recomendaciones para desconectar

Los consejos del experto para conseguir que las vacaciones sean un momento pleno de descanso, y recargar fuerzas para afrontar el resto del año con energía, son:

-Antes de las vacaciones, identificar qué actividades nos hacen sentir bien y nos permiten disfrutar. «Hay muchas personas que no tienen identificado qué actividades les proporcionan descanso, relax o disfrute», dice Barrios.

-Disfrutar el momento en el tiempo y el lugar, aquí y ahora. Consciente de lo que estás haciendo en cada momento. Gozar de un paisaje, de un momento apacible, de una cerveza.

-Apagar el teléfono móvil, para poder desconectar del trabajo. Las llamadas y los mensajes interrumpen nuestra tranquilidad. También hay que olvidar el reloj y guiarnos más por un tiempo biológico que por las horas y los horarios.

-Cambiar de escenario y rutinas, y al variar el paisaje, no hacer las mismas tareas que se hacen en la residencia permanente. Si no se puede cambiar el escenario, al menos sí cambiar las rutinas y los horarios.

-No pretender desconectar solo en verano y disfrutar de unas minivacaciones todos los fines de semana del año. Así, cuando llegue el tiempo de descanso, se podrá desconectar de forma natural.

«Cuando alguien se plantea desconectar en vacaciones es como decir que durante once meses soy una cosa y durante un mes soy otra distinta», concluye Barrios. «El resto del año se debe ser capaz de disfrutar del ocio y dedicarle tiempo. La desconexión sería más fácil porque hemos sido capaces de hacerlo en otras dimensiones más pequeñas».

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