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Ángel Escalera
Sábado, 13 de mayo 2017, 19:58
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El mismo día en que el Papa Francisco proclamó santos a los pastorcillos Jacinta y Francisco, a los que se apareció la Virgen de Fátima hace un siglo, dos imágenes de gran devoción popular salieron en procesión en Málaga. La Divina Pastora de las Almas recorrió las calles del barrio de Capuchinos y la Virgen de Fátima lo hizo por el entorno de la Trinidad.
El primer cortejo en ponerse en marcha fue el de la Divina Pastora. Los sones del himno nacional, interpretados por la Unión Musical Maestro Eloy García, saludaron la salida de la procesión a las 18.07 horas. Por su parte, la Virgen fue recibida con el himno de Andalucía y con un lanzamiento de cohetes. En el cortejo, que lo abría una cruz alzada flanqueada por dos faroles, hubo una representación de las hermandades del Dulce Nombre y la Alegría, de la Archicofradía de María Auxiliadora y de la Agrupación de Hermandades de Gloria. El cortejo mantuvo la tradición de que fuesen en él niños y niñas vestidos de comunión. También participaron un grupo de hermanos con velas, así como pequeños de la catequesis de la parroquia de la Divina Pastora con trajes de pastorcillos.
Una novedad fue que, tras salir de la iglesia, la procesión discurrió por los jardines de la plaza, algo que sucedió por primera vez. El grupo joven de la Divina Pastora se encargó del exorno de la fachada del templo.
El principal estreno fue que se procesionaron dorados los arbotantes del trono, un trabajo, llevado a cabo por el malagueño Alberto Berdugo. También se apreciaron mejoras en el cajillo. La Virgen lució una nueva saya roja, hecha por Sebastián Marchante con bordados del siglo XIX. Otra novedad fue el estreno de la marcha Pastora Malacitana, compuesta por Juan Manuel Parra.
Uno de los momentos más emotivos de la procesión se vivió en la calle Tizo, donde dos hermanos de la congregación cantaron sendas sevillanas a la Pastora. El trono se levantó a pulso, se interpretó la marcha Reina y Madre de Capuchinos y hubo una gran petalada.
La segunda procesión de la tarde la protagonizó la Virgen de Fátima. El cortejo comenzó su andadura con tres cuartos de hora de retraso sobre la hora prevista (las 19.00 horas), ya que la misa previa se prolongó, lo que demoró la procesión.
A la salida de la Virgen de Fátima acudió el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre. El trono en el que iba la imagen, de tres varales, fue portado por mujeres. Los toques de campana para sacar a la Virgen de la iglesia los dio el presidente de la Agrupación de Hermandades de Gloria, Juan Antonio Nieto, invitado por el hermano mayor de la Hermandad de Fátima, José Rojas. En la misa y en la salida de la Virgen estuvo el pregonero del centenario de la Virgen de Fátima, el periodista Paco Cañete. El acompañamiento musical correspondió a la banda Sinfónica de la Trinidad.
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