Tuteo y desprecio

Ayer alguien ganaría el debate (¿Patxi?) y alguien ganará cuando voten los militantes, pero las primarias del PSOE parecen un viaje a ninguna parte. Como si se estuviera eligiendo capitán para el Titanic sabiendo ya los candidatos que el buque se va a hundir. Con una escenografía fea de narices, unos atriles que parecían burladeros, un fondo blanco de fotomatón y un ambiente de tuteo y desprecio, Susana dijo a Pedro: «No mientas, cariño». Cariño, con la diferencia de altura, parecía el profesor Jirafales al lado de Quico y la Chilindrina. Los discursos no eran superiores a los de El chavo del 8. En principio, Susana iba de novia; Pedro, de novio, y Patxi, de dama de honor. Pero el vasco se convirtió en el abuelo sensato a punto de dar a los Werthers Original a Susana y Pedro, que quieren arrimar el Patxi a su sardina. A los tres se les está poniendo cara de Edward Smith. O peor, de Francesco Schettino, el capitán del Costa Concordia.