«El Gobierno no podrá impedir la compra de urnas»

"El referéndum se va a hacer y el Estado va a quedar desbordado democráticamente, tenemos absoluta determinación con el referéndum", ha afirmado el portavoz de Junts pel Sí, Jordi Turull, el día después de que el Gobierno catalán anunciara la compra de 8.000 urnas para la consulta sobre la independencia. "Estamos dando muchos pasos", ha señalado el diputado nacionalista, que esta mañana ha puesto el concurso sobre las urnas como la prueba "fehaciente" de que el independentismo va a por todas en el referéndum, como la prueba de que la consulta se hará y como la prueba que debe disipar cualquier duda sobre la voluntad del soberanismo, por "si alguno piensa que no hay determinación para hacer el referéndum". El dirigente del PDeCAT ha descartado además que el Gobierno central y los tribunales vayan a poder frustrar la compra de urnas.

"No podrán impedirlo, habrá urnas y habrá referéndum", ha dicho. "No tenemos miedo, porque el miedo lo perdimos en el 9-N", ha asegurado. En la misma línea, el diputado de la CUP, Albert Botrán, ha afirmado que la sociedad catalana "está pidiendo avanzar en los pasos del referéndum" y se ha felicitado por el anuncio de la compra de urnas. Eso sí, ha presionado al Gobierno catalán para que anuncie cuanto antes la fecha y la pregunta. "Esperemos que sea el próximo paso", ha expresado.

Turull y Botrán han participado en un acto que el soberanismo ha tributado a los miembros de la mesa de la Cámara catalana que a partir del lunes deberán comparecer como investigados en el TSJC por presunta desobediencia al Tribunal Constitucional. Junts pel Sí, la CUP y Catalunya sí que es Pot han cerrado filas y han reclamado al tribunal que archive la causa contra Carme Forcadell y el resto de miembros soberanistas de la mesa. "Hoy defender el referéndum es defenderlo por todas las vías posibles, no nos frenarán, el referéndum es del pueblo de Cataluña", ha señalado el diputado de la CUP. Turull ha cargado contra la justicia española, el Gobierno central y el Estado español, pues a su juicio con el caso Forcadell atacan a la democracia, al parlamentarismo y a la división de poderes. "Ningún tribunal nos dirá de que podemos hablar en la Cámara catalana", ha apuntado. Turull ha señalado que no hay ningún parlamento del mundo democrático que impida debates y que en el único caso que pasa es en Alemania para abordar el nazismo. Turull ha llamado a la unidad del soberanismo: ""Nos sentimos todos atacados e investigados".

Lluís Rabell, de Catalunya sí que es Pot, ha advertido de que la vía judicial para resolver el caso catalán conduce a un "choque de legitimidades", que solo se resuelve por la "fuerza".

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