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Patxi López conversando, el pasado abril, con el entonces líder del PSOE, Pedro Sánchez. :: mariscal / efe
Sánchez: «Estoy fuerte y con  ganas; no descarto presentarme»

Sánchez: «Estoy fuerte y con ganas; no descarto presentarme»

El exsecretario general pretende reunir esta misma semana a sus fieles para analizar la situación y decidir sobre sus opciones

PAULA DE LAS HERAS

Martes, 17 de enero 2017, 00:52

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Pedro Sánchez no tira la toalla. El exlíder del PSOE ha pasado tres meses, desde su dimisión el pasado 1 de octubre, sumido en una profunda reflexión sobre cuál debería ser su papel en el partido. Ahora parece dispuesto a explorar sus posibilidades, según trasladó ayer, dos días después de que Patxi López comunicara su intención de competir por la secretaría general, a algunos cuadros en los que se apoyó durante los dos años en los lideró la formación con una fuerte oposición interna. «Estoy fuerte y con ganas». Esa es la literalidad de sus palabras. «No descarto presentarme».

Al ex secretario general le han abandonado en todo este tiempo la mayoría de los secretarios regionales que, durante su mandato, pero especialmente en los momentos finales, cuando se abrió el debate sobre si debía o no dejarse gobernar al PP, estuvieron a su lado. La vasca Idoia Mendía, el catalán Miquel Iceta, el riojano César Luena o la balear Francina Armengol, que este mismo lunes lo dijo públicamente en Onda Cero, creen ahora que Sánchez no es el líder que necesita el PSOE. Y esa era una de las bazas con las que contaba el equipo del exlehendakari, convencido de poder recoger y ampliar el caudal 'sanchista'.

López lo confirmó el domingo en la presentación de su candidatura. «Quiero sumar a Pedro -llegó a decir- y a miles y miles de militantes». De momento, y salvo que cambien mucho las cosas, no lo tendrá fácil. Sánchez ha convocado para esta misma semana a sus últimos fieles, entre los que se encuentran el secretario provincial de Valencia, José Luis Ábalos; la diputada asturiana Adriana Lastra o el alcalde de Dos Hermanas, Francisco Toscano. En su entorno explican que tratarán de reunirse antes del viernes, aunque admiten que aún están cotejando agendas y haciendo recuento de los efectivos disponibles tras el salto al ruedo del vasco.

Es eso lo que invita a la prudencia. Aún está por ver cuántos estarían dispuestos a subirse a su barco. Algunos de sus antiguos simpatizantes advierten de que nada hará «más feliz» a Susana Díaz que saber que él se presenta, que su candidatura dividirá fuerzas y que dará a la presidenta de la Junta de Andalucía una victoria segura. Entienden que, de alguna manera, Sánchez puede sentirse «traicionado» por la actidud de los que fueron sus más estrechos colaboradores, ahora en la sala de máquinas de la candidatura del exlehendakari: Luena, que era su secretario de Organización; el que fuera coordinador de su campaña electoral, Rodolfo Ares y, sobre todo, el exportavoz en el Senado, Óscar López, al que durante muchos años le ha unido una amistad personal. Sin embargo, argumentan que él mismo ha alentado con sus dudas que buscaran otro candidato.

Los irreductibles 'sanchistas', en cambio, tienen otro relato. Sospechan que, en realidad, esos tres exdirigentes tuvieron claro desde el principio que Sánchez no debía presentarse y no fueron sinceros. Incluso contemplan la posibilidad de que le empujaran a abandonar el escaño -todos coincidían en que un ex secretario geneneral no puede votar en contra de la decisión del Comité Federal y que, en su caso, tampoco podía abstenerse en la investidura de Mariano Rajoy- para perjudicarle y dejarle sin plataforma. Patxi López es diputado y Susana Díaz podría hacerse senadora.

Traición

En el entorno del diputado vasco -y presidente del Congreso en la pasada legislatura a propuesta, precisamente, de Sánchez- aún creen, no obstante, que hay espacio para el entendimiento. Si no con el núcleo duro del ex secretario general, que creen reducido, sí con los cuadros medios que hasta hace unos días seguían defendiendo que nadie podía capitalizar su tirón entre la militancia. Patxi López, por lo pronto, se defendió en la Ser y aseguró que él no siente haber traicionado a nadie. «Siempre he sido fiel a mi secretario general; no me presento para cortar el paso a nadie sino para defender unas ideas en la que creo», insistió.

No es un dato menor que el exalcalde de San Sebastián, Odón Elorza, diera por hecho este lunes en EITB que Sánchez se presentará y que añadiera que su candidatura debería «converger» con la de López. El diputado guipuzcoano ha acompañado al exlíder socialista en los únicos actos que éste ha celebrado con los militantes desde que abandonó el cargo, en Xirivella (Valencia) y en El Entrego (Asturias) y considera que entre él y el exlehendakari «no hay un espacio de profundas diferencias».

El principal representante de Izquierda Socialista, José Antonio Pérez Tapias, defendió en cambio que es Sánchez quien debe encabezar una candidatura que compita con la que presumiblemente enabezará Susana Díaz. En La Sexta alegó que López sale «del mismo sector» que la andaluza, es decir, que representa como ella a las élites del partido, mientras que el ex secretario general recoge el sentimiento de las bases. Es cierto que el vasco no despierta grandes animadversiones entre los pesos pesados del PSOE. El presidente de la gestora, Javier Fernández, el extremeño Guillermo Fernández Vara o el castellano-manchego Emiliano García-Page reconocieron ayer su bagaje. Pero en su equipo creen que ahí reside su fortaleza.

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