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Citroën C4 Cactus Rip Curl, la aventura como bandera

Citroën C4 Cactus Rip Curl, la aventura como bandera

La nueva serie especial, con dos motores gasolina y diésel, estrena el sistema Grip Control que mejora la tracción en superficies resbaladizas

redacción

Martes, 31 de mayo 2016, 19:10

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Citroën incrementa la gama Cactus con una edición limitada, fruto de la colaboración con la marca Rip Curl. Diseñado y dirigido a un público sobre todo surfero, se caracteriza por un estilo desenfadado y divertido, pensado para un usuario aventurero y al que no solo le guste ir a la playa. Se vende con un motor de gasolina de 110 caballos o bien un diésel de 100 CV, con precios a partir de 20.350 euros.

El Cactus, fabricado en exclusiva en una de las plantas del Grupo PSA en Madrid, es un vehículo diseñado para personas con una filosofía un tanto especial que quieren en cierto modo diferenciarse del vehículo más «normal», y esta versión Rip Curl encarna además los valores de creatividad e innovación habituales en ambas marcas.

El Citroën C4 Cactus Rip Curl combina practicidad y estética y hereda del mundo del surf un compendio de modernidad y dinamismo. La carrocería del nuevo modelo se distingue por algunos elementos exclusivos. Es el caso de las carcasas de los retrovisores y las barras en el techo pintadas en blanco, así como un adhesivo blanco brillante que mezcla motivos geométricos con el logo de Rip Curl.

La marca ofrece hasta cinco tonos de pintura para la carrocería como el rojo, marrón oliva, negro, gris aluminio y blanco perla nacarado. Esos colores se pueden combinar con los Airbump en negro, que son de serie, o en un tono duna. Pensado en el público de esta versión, amante de la aventurera, la carrocería se refuerza con protecciones tanto delante como detrás.

En el apartado mecánico, este Cactus mejora la motricidad con el sistema Grip Control. Integrado en el funcionamiento del control de estabilidad, gestiona el patinado de las ruedas delanteras, que son las motrices, con varios modos de uso para adaptarse al terreno por el que se circula. El coche lleva además neumáticos específicos para barro y nieve, diseñados para circular en cualquier época, independientemente de las condiciones meteorológicas.

El conductor puede optar entre cinco modos de funcionamiento. Desde el normal para las condiciones habituales de la carretera, la posición Arena, Todocamino, Nieve y la última que desconecta el control de estabilidad. Si nos encontramos en la playa, sin duda hay que colocar el mando en Arena, con lo que se consigue un avance progresivo y limita el riesgo de quedarse con las ruedas patinando. El Todocamino, es el aconsejable al circular por terrenos deslizantes sobre barro, hierba mojada o en un camino de tierra. Por último, el de Nieve, nos permite circular con seguridad sobre carreteras nevadas.

Disponible con los motores más potentes de la gama y en combinación con la caja de cambios manual, la oferta se centra en el propulsor de gasolina PureTech de 110 caballos con sistema de parada y arranque automático y el diésel BlueHDi de 100 caballos, mecánicas de última generación y muy eficientes.

Respecto al equipamiento, la serie especial Rip Curl cuenta de serie con numerosas tecnologías que favorecen la seguridad y el confort. Es el caso de la ayuda al arranque en pendiente, el sensor de aparcamiento delantero y trasero, asistente de aparcamiento, regulador y limitador de velocidad programable, techo acristalado panorámico, navegador o cámara de visión trasera en pantalla táctil de 7.

El Cactus Rip Curl de gasolina cuesta desde 20.350 euros y el diésel a partir de 20.950 euros.

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