IU defiende hoy en Sevilla su plan para combatir la explotación laboral en el sector turístico

En concreto, el grupo parlamentario solicitará al Ejecutivo regional la modificación de la Ley de Turismo de Andalucía para incluir planes contra la estacionalidad y la aprobación, precisamente, de un Plan Estratégico a desarrollar entre 2018 y 2020 para luchar contra esta lacra en todo el litoral andaluz. Asimismo IU pedirá garantías en materia de calidad de empleo, Seguridad y Salud laboral de los trabajadores del sector, especificando la necesidad de poner en marcha un plan contra la explotación laboral de las camareras de piso, trabajadoras que, a juicio de la formación, soportan sobre sus espaldas muchas horas de trabajo que ni se cobran ni se cotizan a la Seguridad Social.

De hecho, en lo relativo a las competencias del gobierno encabezado por Mariano Rajoy, la iniciativa parlamentaria de Izquierda Unida solicita una mayor dotación de recursos humanos y técnicos para la Inspección de Trabajo, para garantizar el cumplimiento de las leyes laborales. IU no desaprovechará la oportunidad para exigir asimismo la derogación de la reforma laboral, argumentando que impide alcanzar pactos en el ámbito estatal como el Acuerdo Laboral de Hostelería, que permitiría, explican, proteger las condiciones laborales de todos los grupos profesionales del sector.

El coordinador de IU en Marbella, Miguel Díaz, presentó ayer en rueda de prensa junto a la secretaria local de Acción Política, Victoria Morales, la iniciativa que se defenderá hoy en Sevilla y que tiene especial importancia para una ciudad como Marbella, donde el turismo es el motor de la economía y del empleo.

Díaz abundó en la idea de que los beneficios que genera el sector no se reparten de forma justa entre la masa laboral, que sufre en sus carnes la temporalidad y la explotación laboral. El dirigente de Izquierda Unida apuntó que este año un 52 por ciento de los hoteles de Marbella han vuelto a cerrar tras el verano. Además, para apoyar su argumento expuso datos que refrendan las alzas experimentadas en cuanto número de visitantes, ocupaciones y rentabilidad hotelera frente al exiguo crecimiento del empleo. Así, tiró de estadística oficial y subrayó que mientras el número de visitantes y pernoctaciones ha crecido en los últimos ocho años por encima del 20 por ciento, el empleo solo lo ha hecho en un 0.63 por ciento.

Otro indicador muy a tener en cuenta por el coordinador de IU para hacerse idea de la pujanza del sector es la rentabilidad, que se mide a través de dos indicadores básicos: la tarifa media diaria y el ingreso por habitación disponible. Díaz remarcó el crecimiento experimentado por el primero de estos dos índices, pasando de los 145 euros de la temporada de 2016 a los 152 euros de este año, así como del ingreso por habitación disponible, que ha ascendido un 3,6%, para situarse de los 105 euros de 2016 en los 109 euros durante este ejercicio.