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PABLO COLLANTES
Sábado, 5 de agosto 2017, 00:06
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El Paseo Marítimo es una de las primeras imágenes que los turistas visualizan al llegar a la ciudad. Para preservar su aspecto, el Ayuntamiento está llevando a cabo trabajos de adecuación y mejora en más de 4.000 metros lineales de barandilla que bordean el paso.
El alcalde, José Bernal, visitó ayer la zona para comprobar cómo se está actuando. Respecto a la coincidencia con el periodo estival, Bernal argumentó que, pese a ser la época con la mayor afluencia de turistas, «sirve para salvaguardas las barandillas de los temporales y del mayor grado de humedad que se da en otras estaciones, lo que impediría acometer las mejoras de una forma tan exhaustiva».
Las labores de acondicionamiento, precisó el regidor, «responden al propósito de mantener el Paseo Marítimo en las mejores condiciones posibles por ser uno de los grandes atractivos turísticos de la ciudad».
Para dar cobertura al servicio, se han organizado cuadrillas de entre 7 y 8 trabajadores que provienen de la propia plantilla municipal y del programa +30 y que se están centrando, de forma especial, en la parte de albero.
El alcalde explicó que «no solo se está pintando la barandilla», como hacía el anterior Equipo de Gobierno complicando con el paso del tiempo la propia estabilidad de este elemento de sujeción, sino que cada barandilla se pica, se lija, se limpia para eliminar todo el óxido, se le da una capa de imprimación y se vuelve a repasar con la pintura original.
Por último, el primer edil mencionó el «esfuerzo presupuestario» que hizo el Ayuntamiento para poner a punto el Paseo Marítimo tras el temporal de diciembre, lo que supuso la declaración de zona catastrófica.
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