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Niños en el bosque escuela.
Ojén transforma un antiguo parque de caza en la sierra en Reserva Ecológica

Ojén transforma un antiguo parque de caza en la sierra en Reserva Ecológica

El espacio, de unas 82 hectáreas, se explota ahora mediante una concesión de la Junta como área de educación ambiental y refugio de animales heridos

Mónica Pérez

Lunes, 16 de enero 2017, 00:29

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Un antiguo parque cinegético (de caza) ubicado en la Sierra de Ojén, transformado en Reserva Ecológica. Es el proyecto en el que han estado trabajando durante meses la Agrupación Ecologista Pinsapo y la empresa Monte Aventura, junto a voluntarios, y que finalmente ha obtenido el visto bueno de la Junta de Andalucía. A día de hoy el entorno es un espacio dedicado a observación de la fauna y flora, la protección de la naturaleza y la educación ambiental, a la vez que permite «un aprovechamiento sostenible compatible de carácter educativo, cultural, científico y de ocio», explica uno de los responsables del proyecto, Antonio Calvo.

«Para conocer exactamente qué se está haciendo aquí, hay que venir y comprobar la riqueza de flora y fauna y todo lo que estamos trabajando para su conservación», sostienen los promotores de la iniciativa, concebida como un nuevo concepto de gestión y protección de la naturaleza.

El proyecto para la creación de esta Reserva Ecológica en la zona nació tras el devastador incendio que arrasó buena parte de la sierra de la Costa del Sol en el verano de 2012. El monte de Ojén resultó especialmente dañado. Las tareas de reforestación y el trabajo de administraciones y voluntarios permitió que en poco tiempo el dantesco escenario que dejaron tras de sí las llamas cambiaran radicalmente de aspecto. De ese trabajo surgió la idea de la Reserva Ecológica y protección de este entorno ubicado en un lugar privilegiado entre Sierra Blanca y la Costa del Sol.

Los privados que ahora explotan la zona tras conseguir de la Junta de Andalucía la concesión y gestión de unas 82 hectáreas de monte público, trabajan con un exhaustivo plan de acción que ya presentaron ante la administración que pasa por la conservación de la naturaleza y custodia de la fauna autóctona y abrir un espacio protegido donde facilitar a las personas el contacto directo con la naturaleza, «para que aprendan a amarla y conservarla», explica Antonio Calvo, quien subraya el valor que como «laboratorio vivo para estudiar y conservar diferentes especies» tiene la zona. A lo largo del recorrido es fácil observar abundante fauna ibérica como el ciervo, la cabra montés, el muflón, camaleón, así como rapaces, variados reptiles y anfibios además de la rica flora mediterránea.

En todo el tiempo que ha consumido la tramitación de los permisos y la declaración oficial de la protección de la zona el trabajo de los voluntarios han sido incansable. Se han desbrozado senderos, se han construido cajas nido para pájaros y hasta hoteles insecto que ahora forman parte del equipamiento que se ofrece al visitante, junto a áreas recreativas, juegos, observatorio e fauna, estaciones interpretativas y rutas de senderismo.

Una de las funciones más llamativas que se realizan en la Eco Reserva de Ojén es la del bienestar animal. Para ello se ha dispuesto un espacio, bautizado como santuario de la fauna autóctona, donde han empezado a llegar animales procedentes de centros de recuperación o de rescate, con lesiones irrecuperables, que no pueden vivir en la naturaleza por sí solos.

El mantenimiento de la zona y el equipamiento se sufragará mediante el cobro de las visitas de turistas, la Agrupación de Amigos de la Reserva Ecológica de Ojén, acuerdos con asociaciones ecologistas para el desarrollo de actividades de esoterismo, con touroperadores y con empresas mediante convenios de patrocinio o mecenazgo. En este sentido, ya hay firmas como GSA_Servicios Ambientales o Grupo Vera, que han puesto su granito de arena en esta iniciativa con donaciones de materiales. En el primer caso, con contenedores de reciclaje que se han convertido en observatorios de fauna. Y en el segundo, con la aportación de casetas de obras en desuso que ahora serán reutilizadas.

El Ayuntamiento de Ojén busca igualmente la fórmula de apoyo a la iniciativa dentro de las «posibilidades que como administración tenemos a la hora de respaldar una iniciativa que es privada», explica el alcalde del municipio, José Antonio Gómez.

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