Comienzan las obras del carril alternativo que despejará de bicicletas el paseo marítimo

El pasado viernes los operarios comenzaron los trabajos de señalización y pintura en una de esas vías que desde ya se ven afectadas. Se trata de Ortega y Gasset, donde la circulación ha quedado reducida a un solo carril y en un solo sentido (sur-norte). Esta medida ha permitido ganar plazas de aparcamiento, que ahora se sitúan a ambos lados de la calle pero en batería. Además, al menos de momento, se puede aparcar gratuitamente al no haber sido incluida esta calle en el área de influencia de la zona azul.

A partir de hoy se concluirá la señalización en Ortega y Gasset y se actuará en otra de las vías que presentarán cambios a partir de esta semana. Se trata de la calle Estébanez Calderón. En este caso las medidas son las mismas que en la vía vecina, es decir, se reduce la circulación a un único carril y los aparcamientos a ambos lados de la calle se realizarán en batería para dar cabida a más vehículos. En este caso, el sentido de la circulación se hará (norte-sur).

De forma paralela los operarios iniciarán los trabajos para acondicionar el nuevo carril bici que arrancará en la avenida de España, a la altura del Faro, y acabará en la rotonda situada al final de la avenida Camilo José Cela. La idea es que los ciclistas que circulan por el paseo marítimo, una vez llegados al Faro, puedan tomar esta alternativa, evitando así la presencia masiva de peatones que en verano presenta este punto concreto del paseo al borde del mar.

Convivencia

«La convivencia hasta el momento entre peatones de ciclistas no ha presentado ningún tipo de problemas, pero con la llegada de la temporada alta de verano, cuando este tramo de mármol del paseo congrega a más personas, hemos pensado, y así lo consensuamos en la Mesa de la Bicicleta, que era mejor crear esta vía alternativa», explica el concejal de Movilidad, Miguel Díaz.

En el caso de la avenida de España, pasará a formar parte de la red de ciclocalles de la ciudad. En cuanto a la avenida Severo Ochoa, por donde discurrirá el carril, verá reducido el número de aparcamientos al eliminarse todos los existentes en la parte izquierda (entrando en la avenida sentido Cádiz). En la margen izquierda se construirá el carril bici, que será bidireccional, separado de la circulación con una isleta y una franja de 0,80 metros. Sin embargo y con la idea de recuperar hasta el 30% de las plazas para aparcar que se perderían con esta medida, el estacionamiento en toda la calle se hará a la derecha en batería y no en línea como se viene haciendo hasta ahora. «Además, las medidas que se han proyectado para algunas de las calles cercanas, como Ortega y Gasset y Estébanez Calderón, contribuyen a que se recuperen los aparcamientos reducidos en la avenida principal», apunta Díaz.

Otra novedad importante que deberá tenerse muy en cuenta a partir de esta semana, y una vez que los trabajos de acondicionamiento hayan concluido, es que Camilo José Cela será de un único sentido para la circulación, en concreto, sentido Málaga-Cádiz.

El proyecto diseñado desde el área de Movilidad incluye además otorgar una mayor visibilidad a las intersecciones entre las calles de esta zona, con una ampliación de las esquinas, que serán más abiertas.

El verano será la prueba de fuego para estas nuevas medidas que afectarán a la circulación de coches, de bicicletas y también al tránsito de peatones por una zona del centro de Marbella con gran afluencia de turistas. Con los resultados sobre la mesa, y una vez que concluya la temporada estival, los técnicos determinarán qué nuevas medidas se pueden adoptar en la zona. De entrada el carril bici se ejecutaría con una intervención de obras. Se estudia también el cambio de sentido del tráfico en Arturo Rubinstein.