Vecinos de Estepona Golf y Valle Romano piden la exención del pago de las cuotas de urbanización

El año 2015 puede empezar a dejar un buen agujero económico a los vecinos de Estepona Golf y Valle Romano. Durante las últimas semanas, estos residente de la parte más occidental del municipio empezaron a recibir los recibos para el pago de la primera parte de las cuotas de urbanización de sus barrios, que de media, oscilan los 30.000 euros por cada vivienda.

Este proyecto, según explican los vecinos de la zona, fue puesto en marcha por la junta de compensación hace ya varios años, formada por los propietarios de la mayor parte de los terrenos -entre los que se encuentra un campo de golf-, que quieren desarrollar el suelo urbano no consolidado por un valor de 11 millones.

«Nosotros creemos que no debemos pagar nada. En las dos calles en las que nos encontramos la mayoría de los vecinos no hace falta urbanizar nada. Tenemos nuestra luz, nuestra carretera y nuestro agua, así que no sé que se quiere urbanizar», afirmó Manuel Sánchez, uno de los portavoces de los vecinos de la barriada.

Estos 200 vecinos, según apunta Sánchez, son en su mayoría extranjeros y jubilados, que ahora no saben como harán frente a estos pagos, mayores o menores según el tamaño de la casa. La situación en Valle Romano es similar. Sánchez matizó que en esta barriada vecina, los pagos de urbanización se elevan en algunos casos hasta los 80.000 euros. «En estos años se han hecho muy pocas actuaciones por aquí. N sabemos porque hemos de pagar, si ya abonamos los impuestos correspondientes», sentenció Sánchez.

Manifestación

Los vecinos de estas dos barriadas planean una manifestación para dar voz a sus problemas, pero para que sea de mayor afluencia y no solo de los vecinos de estas urbanizaciones, que englobe otras problemáticas del municipio, como la saturación de los ambulatorios o el CHARE.

Desde Izquierda Unida, su coordinador local, Antonio Murcia, explicó que el pago de los 2,4 millones que se reclama a los vecinos de Valle Romano es «discriminatoria» ya que las actuaciones de reurbanización que el Ayuntamiento llevó a cabo en el casco histórico de la ciudad, tuvo coste cero para sus vecinos. Por ello, pidieron una partida en los presupuestos municipales para reducir el abono de las cuotas a los vecinos.

Por su parte, el Ayuntamiento detalló que estas obras debían ser desarrolladas por la promotora y los propietarios del suelo, ya que así lo marcadas el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 1995. Además, afirmaron que las actuaciones de urbanización fueron licitadas por el anterior gobierno y ahora solo se le da cumplimiento a este trámite.

El Consistorio también afirmó que los propietarios eran conocedores de que debían hacerse cargo de la urbanización de la zona al tratarse de un suelo urbanizable y que para facilitar ese pago, se permitirá hacerlo de forma fraccionada.