Borrar
Valeria Mazza con su marido en aguas marbellíes.
Felipe González, de incógnito en Marbella

Felipe González, de incógnito en Marbella

El expresidente ha estado una semana en la Milla de Oro y no se ha enterado nadie más que su entorno más íntimo. Más difícil lo tiene Valeria Mazza, que se ha quedado un mes

rosa villacastín

Viernes, 29 de agosto 2014, 00:55

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

En esto de la popularidad de los famosos hay clases. Yo les divido entre los que hacen el pino en el alambre con tal de salir en la foto y los que se inventan todo tipo de triquiñuelas para pasar inadvertidos. Entre los primeros, hay un ejército de modelos, presentadoras, actrices y actores, de manera que das una patada y salen diez de debajo de las piedras. Entre los segundos, hay más diversidad de criterios. Por ejemplo, entre los políticos los hay que creen firmemente que deben preservar su imagen del escrutinio público y otros, que copiando a los americanos se exhiben con sus familias con total naturalidad, cosa que no me parece mal, porque dan normalidad a un trabajo que es el de la política no muy diferente de cualquier otro.

Aquí en Marbella, en los últimos días he tenido oportunidad de comprobar que mientras José María Aznar corre que se las pela cada mañana por Guadalmina alta y baja, acompañado de dos escoltas como armarios que se las ven y se las desean para seguir al jefe, a éste no le importa si le hacen fotos o no (a mí con sus tabletas tampoco me preocuparía mucho). Por el contrario, Felipe González disfruta de la tranquilidad de su hogar, bueno del suyo no, del de su cuñado Pedro Trapote, siempre abierto para recibir al líder socialista, sin que éste se sienta presionado por la prensa. Y lo consigue. Vaya si lo consigue.

Una semana ha estado González con Mar García Vaquero, su mujer, en el corazón de la Milla de Oro marbellí y no se ha enterado nadie más que su entorno más intimo. No es el único, ya que tomando cañas en El Estrecho de Marbella pueblo estuvo el fin de semana pasado Carmen Chacón, con su marido y su hijo, y no se enteró ni el tato. Bueno, me enteré yo, se lo comenté a Josele y cuando llegamos ya se había marchado y le perdimos la pista. Gajes del oficio.

Otra estancia que pasó sin pena ni gloria fue la de Isabel Preysler y Miguel Boyer. Un caso insólito, aunque tratándose como se trata de la reina de corazones, a nadie debe extrañar que conozca todos el catálogo de trucos para salir de su casa o de la casa de sus amigos los Amusátegui en Marbella, sin que le vea nadie. Un secretismo que ella justifica porque quiere disfrutar de unos días de descanso con su marido, lejos de los focos porque después el invierno es muy largo.

Más difícil lo tienen mujeres como Patricia Rato, Lara Dibildos, o Valeria Mazza, tan espectaculares las tres que no dudan en lucir su palmito bien sea en Sotogrande, donde Patricia pasa parte del verano con sus hijos, o en Marbella donde se encuentran todavía Lara Dibildos y Valería Mazza. La modelo argentina, que vino para un par de días, le cogió gusto y se ha quedado casi un mes porque mientras en Buenos Aires es puro invierno en la Costa del Sol hace una temperatura deliciosa.

Y como broche, me cuentan que Carlos Slim el mexicano más rico del mundo ha estado en el hotel Las Dunas haciendo un régimen que se va a hacer famoso porque Félix Revuelta el riojano dueño de Naturhouse se ha propuesto que adelgacemos, algo muy necesario pero casi imposible.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios