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La ley del grafiti

La ley del grafiti

El código desaconseja 'pisar' una obra existente

Antonio Javier López

Martes, 14 de julio 2015, 01:19

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Eso tiene tarea... A veces he tenido que mediar entre algunas 'crews'... Depende de cómo sea la pieza y del estado en el que esté, pero lo mejor, de partida, en no pisarla. Habla un grafitero, que prefiere no ver su nombre publicado, sobre los códigos que rigen las pautas de conducta de los escritores de grafitis. Un asunto delicado, sobre el que charla con cautela, si bien matiza raudo que los encontronazos entre los grupos de grafiteros reunidos bajo unas letras ('crews') son la excepción a la norma. La inmensa mayoría somos gente sana, defiende.

En esencia, la primera norma consiste en no tapar ('pisar') una pieza ya realizada para colocar la tuya encima. Sucedió hace unas semanas en el cauce del Guadalmedina durante la elaboración de la pintada de Javier Calleja e Imon que representa a una figura ondulante y negra rodeada de vegetación. Los organizadores del festival Málaga, Arte Urbano en el Soho (MAUS) preguntaron al autor de una pieza ya existente si podían taparla con la nueva obra. El afectado se opuso, así que Imon y Calleja tuvieron que rodearla; sin embargo, al final accedió y el resultado final es el que ahora puede verse en el muro del cauce a la altura del CAC Málaga.

Realmente no hay un còdigo escrito o secreto en el grafiti, a mi parecer, pero sí, digámoslo así, una ética, si quieres que tus piezas perduren y ganarte el respeto de lo demás escritores de graffiti. No se debe pisar la 'pieza' de otro escritor, si es así, se debe informar al mismo o de lo contrario en breve ese escritor te tachará o pintará encima de nuevo, hay gente que opina que hay un rango en plan, 'throw up' puede pisar 'tag', pieza elaborada o mural puede pisar a 'throw up'..., explica el malagueño D.Darko.

D.Darko combina su trabajo urbano con exposiciones 'de interior' como las que ha protagonizado en el CUC de Antequera o en la galería La Casarosa de la capital. Si tienes confianza con el escritor o la pieza está muy deteriorada puedes hablarlo o 'negociarlo' por otros lugares, caso aparte es cuando realizas un trabajo legal y eres contratado para realizar la decoraciòn de un inmueble, sigue el artista.

La gente confunde el 'street art' con el grafiti. El grafiti en realidad son sólo firmas, más o menos elaboradas, de pintura con espray. Hay un elemento territorial y de estatus y dentro de cada grupo hay un líder que se muestra en función de sus obras, acota el fotógrafo Txema Rodríguez. Si le pisas encima es una declaración poco amistosa. Dentro del mundo de la calle hay normas no escritas pero del mismo modo, dentro de ese mundo se percibe lo que tiene valor y lo que no, esgrime Rodríguez.

Lo mejor es hablarlo y mantener el respeto y el buen entendimiento en un mundo donde la mayoría de las veces conoces a la gente sin ponerles un rostro, aunque ese no es el caso de Málaga, donde a pesar de ser una ciudad grande y con un movimiento de grafiti importante nos conocemos todos o hemos coincidido alguna vez, cierra D.Darko.

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