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Imagen de la marcha por una sanidad pública digna y de calidad celebrada en Málaga el 15 de enero.
¿Y después de las protestas sanitarias, qué?

¿Y después de las protestas sanitarias, qué?

Salud se enfrenta al reto de atender las peticiones de mejora tras la presión ciudadana y profesionales y plataformas dicen que la Junta tiene que aprobar un plan de choque para Málaga

Ángel Escalera

Domingo, 22 de enero 2017, 01:25

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Que la bola de nieve creada por las protestas sanitarias de los últimos meses siga creciendo y provoque un alud incontenible o que se disuelva bajo los rayos del sol dependerá de cómo actúe la Consejería de Salud. La forma en que mueva ficha inclinará la balanza en un sentido o en otro. Lo cierto es que el aumento de la presión ciudadana para exigir a la Junta de Andalucía mejoras urgentes en la sanidad pública de Málaga es un hecho que se vio refrendado en la manifestación del 15 de enero. La protesta, mucho más numerosa que la habida el pasado 27 de noviembre, evidencio que los malagueños están descontentos por las carencias del sistema sanitario. Lo que tanto los profesionales como los colectivos ciudadanos esperan es que Salud los escuche y apruebe un plan de choque, con la suficiente dotación económica para que los hospitales públicos y los centros de atención primaria malagueños reciban un impulso importante. En caso de no hacerlo habrá un recrudecimiento de las protestas.

La creación de varias plataformas sanitarias en Málaga ha traído consigo un ascenso de las quejas por las deficiencias existentes. Las dos marchas por una sanidad pública digna y de calidad celebradas hasta ahora han sido convocadas por el profesor Jonathan Andrades. En ellas, entre otros asuntos, se reclamó la construcción del tercer hospital en la capital y de los chares de Estepona, Mijas y Torremolinos, el incremento de las plantillas de trabajadores para que Málaga se equipare a la media española, que haya unos presupuestos finalistas para la sanidad publica y la apertura completa de los hospitales de Marbella, Ronda y Cártama. La respuesta de Salud es que varias de esas reivindicaciones ya se han hecho o están en proceso de llevarse a cabo.

Aunque aún es mucho lo que falta por conseguir, empiezan a atisbarse cambios en el comportamiento de la Consejería de Salud. Sin duda, tienen que ver con las protestas realizadas por la población en varias ciudades andaluzas. Utilizando el símil del cuento, se puede decir que los que mandan en la sanidad pública andaluza le están viendo las orejas al lobo, entendiendo por lobo la reacción de los ciudadanos que, después de soportar con estoicismo los recortes, el incremento de las listas de espera diagnósticas y quirúrgicas, las demoras para ser atendidos en las consultas especializadas y para que les hagan pruebas exploratorias y de sufrir colapsos en los servicios de urgencias, han dado un decidido paso adelante y no están dispuestos a que las carencias continúen campando a sus anchas en hospitales y centros de salud.

Es positivo que el consejero de Salud, Aquilino Alonso, se haya reunido con una representación de médicos jubilados de Málaga o que la Delegación Provincial de Salud esté negociando una serie de mejoras con el Colegio de Médicos de Málaga (el próximo jueves volverán a verse las caras). Sin olvidar el acuerdo alcanzado entre la citada delegación y la Plataforma por la Calidad de la Sanidad Malagueña (Placasama). Ambas partes firmaron un documento que contempla actuaciones que redundarán en beneficio de los malagueños.

Ahora falta que el consejero de Salud se entreviste con el colectivo que lidera el mencionado Jonathan Andrades. La explicación dada por Salud sobre por qué ese encuentro no se ha producido todavía es que en el escrito que la plataforma le envió no aparecía un número telefónico o una dirección de correo electrónico para ponerse en contacto con los autores de la carta. Como Andrades ha remitido un segundo documento en el que sí están incluidos esos datos, lo previsible es que esta vez la cita con el consejero sí se produzca para debatir sobre la situación sanitaria de la provincia de Málaga.

La consecución de mejoras para la sanidad pública es un objetivo irrenunciable para el Colegio de Médicos de Málaga. Su presidente, Juan José Sánchez Luque, defiende que la Junta de Andalucía tiene que aprobar un plan de choque con el objetivo de desbloquear el panorama actual, ya que la dotación presupuestaria, pese al aumento habido en los últimos tres años, sigue estando por debajo de lo deseable. Asimismo, aboga por un cambio en el modelo de gestión, que debe de mirar más hacia los profesionales .

Desde Salud se argumenta que no hay ninguna provincia española que haya abierto en el plazo de medio año dos centros hospitalarios, en referencia a los del Guadalhorce y Ronda. También se refiere a que se contratará a más de 3.000 profesionales en Andalucía tras la implantación de la jornada de 35 horas semanales.

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