Filomena, de barrendera de Limasa a tertuliana en Telecinco

Pero sobre todo, esta 'dominguera' de Limasa (como se conoce a los trabajadores contratados para los fines de semana y festivos) se ha convertido en los últimos años en una asidua de los 'realities'. Colaboró de forma puntual en la edición de 'Supermodelo' en 2008 (Telecinco) y también en 'El jefe infiltrado' de La Sexta (en un capítulo diferente al que protagonizó un mando de Limasa). Ha sido suplente para entrar en 'Gran Hermano' y quedó junto a su marido entre los diez finalistas de 'La casa de tu vida', en el que distintas parejas tenían que construir una casa y los ganadores se la quedaban. Pero además, también se mudó durante una semana a otra vivienda de la capital para intercambiarse por otra mujer en 'Me cambio de familia', un formato emitido por Cuatro.

Ahora, esta barrendera se embarca en una nueva aventura junto a su hermana Virginia, con la que además de sangre también comparte empleo. Se trata de 'Sentido común', una de las apuestas de Telecinco para el próximo otoño en el que ciudadanos anónimos de distintos puntos del país opinarán sobre asuntos de actualidad, desde el famoseo a alguna noticia relevante de ámbito nacional. El vídeo promocional ya se está emitiendo en las cadenas de Mediaset, y en él se puede ver a Filo y Virginia charlando sobre Ana Obregón, de su edad o si está operada. «Tienes una opinión para todo? ¿Eres de los que no se callan ni debajo del agua? Pues 'Sentido común', el nuevo programa que llegará a la parrilla otoñal de Telecinco, es tu sitio. ¡Queremos oírte! A ti y a esa persona con la que siempre cotilleas, hablas o discutes. Ellas ya han empezado a hablar de Ana Obregón... ¿no quieres opinar tú también?», comenta la cadena en la promoción del casting en el que invita a participar a más personas.

El programa está concebido como un show de noticias con gente real, grabado fundamentalmente en sus lugares de trabajo mientras discuten sobre los temas más comentados del día o la semana. En el caso de las dos barrenderas malagueñas, se simula que ambas aprovechan el descanso del bocadillo para charlar sobre algún asunto de la vida social, política o deporte. No se trata de entablar un debate de expertos, sino de recrear una conversación que estas hermanas podrían tener en la vida real. Como la que cualquiera puede tener en el bar, en casa o con los amigos.