Secciones
Servicios
Destacamos
Málaga
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Martes, 17 de octubre 2017, 00:26
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
El Ayuntamiento de Málaga tomará medidas para tratar de evitar que el entorno de la desembocadura del Guadalhorce siga siendo un vertedero por la combinación del incivismo y la falta de limpieza. Por un lado, pedirá formalmente a la Junta de Andalucía que actúe en el interior del espacio protegido, por ser de su competencia, mientras que respecto a lo que corresponde a la Administración municipal, que son las márgenes del río, se ha comprometido a reforzar el dispositivo de Limasa, que actualmente se reduce a la recogida de las papeleras y a intervenir cuando lo demandan los vecinos o el director del paraje. De forma paralela, también incrementará la presencia policial en la explanada próxima a la urbanización Sacaba Beach en la que estaban los antiguos depósitos de gas, que son propiedad de Repsol y que se ha convertido en los últimos tiempos en una especie de taller al aire libre en el que es frecuente ver a personas cambiando el aceite del coche.
«Además de la limpieza y la concienciación, también hace falta la sanción para evitar estas prácticas. Hay que ser más contundentes aún por su proximidad al paraje natural», afirmó ayer el concejal de Sostenibilidad Medioambiental, Raúl Jiménez, durante su intervención en la comisión plenaria del ramo en la que se aprobó por unanimidad la moción presentada por IU-Málaga para la Gente en la que se insta tanto al Ayuntamiento como a la Junta de Andalucía a mejorar el estado de la desembocadura del Guadalhorce tanto por la acumulación de residuos como por el aspecto que presentan los canales de pluviales paralelos, donde el agua se queda estancada, tal y como denunció este periódico.
«No puede ser que este enclave se convierta cada cierto tiempo en un basurero por la falta de coordinación entre las distintas administraciones implicadas», se quejaba la edil de la formación de izquierdas Remedios Ramos, quien recordó que la gestión del paraje corresponde a la Delegación Territorial de Medio Ambiente; los canales de pluviales, a la Agencia Andaluza del Agua; la playa, a la Dirección General de Costas; y las márgenes del río, al Ayuntamiento. En este sentido, Raúl Jiménez destacó que hay comunicación permanente entre técnicos de Ayuntamiento y Junta, aunque sí que reclamó al Ejecutivo regional «más acción», haciendo referencia a la instalación de papeleras y bancos en el espacio protegido. «Dentro del paraje el estado es bastante mejorable. Es necesaria la presencia de mobiliario (papeleras y bancos) que se compraron y luego fueron retirados. Estoy convencido de que habrá interés en arreglarlo», apuntó.
El PSOE también incidió en la «importancia de la coordinación y el trabajo en equipo para preservar este enclave», aunque su edil, Begoña Medina, también mandó un recado al equipo de gobierno del PP poniendo el acento en que «el mayor problema está en los alrededores del paraje y, sobre todo, en el solar ubicado junto a Sacaba». Al tratarse de unos terrenos de titularidad privada, el Área de Sostenibilidad Medioambiental plantea que desde la Gerencia Municipal de Urbanismo requieran a Repsol que retire las estructuras de hormigón. En estos 40.000 metros cuadrados de terreno, el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) contempla un uso público para la creación de zonas verdes y equipamiento, pero de momento sigue sin materializarse la expropiación de la finca por parte del Consistorio.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.