IU critica la visita de los legionarios al Materno autorizada por los padres
Los militares fueron a las habitaciones de los niños de Oncología con permiso y les dieron regalos; y cantaron el himno para otros en la ludoteca
Pilar R. Quirós
Miércoles, 12 de abril 2017, 00:36
Vivimos en una época en la que ciertas posverdades corren por las redes como si fuesen ciertas, aliñadas con mucha indignación y consternación por lo ... ocurrido, pero en la que pocos tiran del hilo para ver exactamente lo que pasó. La visita de los legionarios al Hospital Materno Infantil el pasado lunes sirvió ayer para que las redes sociales echasen humo, con personas a favor y en contra de la misma, a lo que se sumó que el parlamentario de IU por Málaga José Antonio Castro, anunciara ayer que iba a registrar una pregunta en la Cámara andaluza sobre la presencia de legionarios en el Materno, porque a su juicio es «inaceptable» que la Junta «facilite la presencia de militares en un centro público, vinculados a la Semana Santa y cantando el himno de la Legión, con el agravante de que lo hacen en la planta de oncología infantil».
Tras este envite del parlamentario andaluz sólo quedaba hacer una cosa:preguntar en el Materno cómo aconteció esa visita, quién la gestionó y si tenía el plácet del personal médico y de los familiares de los niños.
La intrahistoria de cómo se gestó la presencia de los caballeros legionarios en el Materno es la siguiente. Hace un par de meses, la Congregación de Mena solicitó por escrito una visita por parte de la Legión a los niños ingresados en el Hospital Materno Infantil durante la Semana Santa. La Comisión de Actividades Lúdicas del centro sanitario formada por médicos, enfermeros, auxiliares, administrativos, trabajadores sociales y una maestra dio el visto bueno a esta actividad considerándola siempre de tipo social y no militar, tal y como explica la coordinadora de este órgano, Margarita Sánchez. Antes de que tuviera lugar esta visita el pasado lunes, ella misma se encargó de recorrer las habitaciones de la cuarta planta de Oncología Pediátrica para comprobar si los padres de los 14 niños ingresados estaban de acuerdo con que los caballeros legionarios pasaran un rato con sus hijos. «Ninguno se opuso», según Sánchez, que afirma que tanto a los menores como a sus familias «les hizo mucha ilusión, no paraban de hacer fotos con sus móviles». Además, y por si fuera poco, a los legionarios se les informó de las precauciones que debían tomar antes de entrar a cada una de las habitaciones, donde conversaron con los niños, se hicieron fotos y les dieron regalos, como camisetas y borregos de peluche.
Tras recorrer la planta de Oncología, y según explica la responsable de la comisión, se trasladaron a la ludoteca infantil, donde les esperaban niños en edad preescolar ingresados por diversos motivos como traumatismos o apendicitis, y ante ellos cantaron la canción Soy el novio de la muerte, algo que los pequeños «agradecieron mucho porque no pueden ir a la Semana Santa». Según Margarita Sánchez, esta visita, al igual que la que pueden realizar payasos o cuentacuentos, son beneficiosas para los niños ingresados «porque todo lo que no sea hablar de su enfermedad les ayuda en su recuperación». «Creo que hay que normalizar las cosas, se trata de acercarles la Semana Santa, al igual que se hace con la Feria o con el Día de Andalucía», apuntó.
En la denuncia de IU, es erróneo quelos legionarios cantaran el que llaman himno de la Legión (en realidad es un cuplé hecho canción que entonan estos militares en sus principales actos) a los niños enfermos de Oncología. Los caballeros legionarios sí les visitaron en sus habitaciones y les hicieron regalos, pero no les cantaron a ellos sino a otros pequeños con dolencias menores en la ludoteca del hospital.
Otra de las frases de Castro es que la visita no «respeta la libertad religiosa, ni el estado de las personas que están ingresadas en el hospital así como sus familiares». Esto no concuerda, porque precisamente los familiares habían dado su permiso y los que vieron a los caballeros legionarios motu proprio no consideraron que se vulnerase su libertad religiosa.
El pediatra Antonio Jurado, que fue durante veinte años jefe de esta especialidad en el Materno y que actualmente es presidente del comité científico de la Asociación Española de Pediatría, no entendía ayer el revuelo que había montado una visita de miembros del Ejército Español, cuando antes, años atrás, también habían ido los paracaidistas, y no hubo ninguna crítica. Explicó que a los niños y a sus familiares les agrada muchísimo cualquier visita de alguien famoso (futbolista, jugador de baloncesto)o del Ejército en este caso, y que «el lunes tuvieron un cachito de Semana Santa sin salir de sus habitaciones;a los niños les gusta que vayan a verles y disfrutan mucho ellos y su familia;creo que no lo van a olvidar en su vida». Indignarse porque vaya la Legión, para Jurado, es una «majadería», que además les pide a los políticos que se preocupen de verdad por que los niños tengan un calendario vacunal que cubra todas las enfermedades prevenibles, que haya suficientes plazas MIR para pediatría, y que a los niños les asistan siempre especialistas pediátricos. «Esto es lo verdaderamente importante», añadió.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión