Borrar
Lorena y Mahmoud observan los trabajos de cimentación que se están realizando junto a su vivienda.
«Llevamos un mes fuera de casa y aún no sabemos hasta cuándo ni si nos pagarán los gastos»

«Llevamos un mes fuera de casa y aún no sabemos hasta cuándo ni si nos pagarán los gastos»

Mahmoud, Lorena y su bebé de 18 meses viven en un piso de alquiler desde que la caída de un muro por la tromba les obligó a abandonar su vivienda de forma preventiva

Francisco Jiménez

Martes, 21 de marzo 2017, 00:31

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Lo primero que Mahmoud y Lorena piden es que su vestimenta no lleve a engaños. «Vamos en traje, pero que nadie piense que nos sobra el dinero. Somos mileuristas y trabajamos llamando a las puertas como comerciales de seguros». Con esta aclaración, esta pareja pretende hacer hincapié en el agujero económico que les está suponiendo tener que vivir de alquiler a la espera de que se levante la orden de desalojo preventivo que pesa sobre su casa desde la tromba que padeció Málaga la madrugada del 19 de febrero. Las intensas lluvias provocaron que se viniera abajo el muro que estaba justo encima de su vivienda, en la calle Charcón (Mangas Verdes), que acabó sepultando su moto. Además, los daños se agravaron por la rotura de una tubería de la red de saneamiento que acabó anegando la planta baja del inmueble. «El estruendo fue tan grande que pensábamos que se estaba cayendo la casa», relatan.

Las tres familias de Cerrado de Calderón siguen a la espera

  • Las tres familias de Cerrado de Calderón que tuvieron que abandonar sus casas de forma preventiva por el hundimiento de 52 metros de la calzada de la calle Los Flamencos siguen sin poder volver a sus domicilios. Una vez concluidos los trabajos de estabilización del talud provocado por la tromba para evitar nuevos deslizamientos del terreno, las labores se centran en la retirada del volumen de tierra para comprobar si el muro del edificio colindante está dañado. «El lunes pasado nos llamaron para decirnos que podríamos volver el jueves, pero cuando llegó ese día nos dijeron que tardaría un poco más. Sin embargo, hoy ayer para el lector la obra ha estado parada», afirma uno de los vecinos afectados. De las tres familias desalojadas, dos permanecen en casa de familiares, mientras que el inquilino del tercer inmueble fue realojado en un hostal por el Área de Derechos Sociales.

Un mes después, el riesgo de nuevos corrimientos de tierra está controlado tras los trabajos de contención realizados, pero esta familia no tendrá permiso para volver hasta que se construya la nueva estructura de hormigón. ¿Cuándo será? Técnicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo, que ayer supervisaron las obras de cimentación del vial, apuntaron que la actuación del muro se acometerá esta semana y que en el mejor de los casos, no estarán terminado hasta finales de la próxima.

Mientras tanto, esta pareja y su pequeña de 18 meses seguirá en el piso que tienen alquilado en la barriada de Santa Cristina. Y su perro, en la residencia canina. «Entre la fianza y la renta hemos pagado 1.500 euros, mientras que con el perro la factura va ya por 200 euros. Un gasto al que habrá que sumar los daños sufridos en el interior por todo el agua que entró. Llevamos un mes fuera de casa y aún no sabemos cuándo volveremos ni si nos pagarán todos los gastos», se lamenta Mahmoud Teageldin.

Rechazaron un piso social

En este sentido, cabe reseñar que el Ayuntamiento les ofreció la posibilidad de alojarse en uno de los pisos gestionados por los Servicios Sociales, aunque lo rechazaron por su ubicación. «Con un bebé no nos podemos meter en cualquier sitio, así que nos dijeron que alquiláramos y que el Consorcio de Compensación de Seguros se haría cargo», remarca Lorena Banderas. Sin embargo, el organismo estatal ya ha comunicado que no asumirá este gasto porque el muro (de 15 metros de largo y 2 de alto) estaba en mal estado, como queda acreditado en varios informes emitidos por Bomberos en el último año a raíz de sendos avisos vecinales.

SUR ha tenido acceso a uno de ellos, del 23 de abril de 2016, en el que se advierte de la existencia de «una fractura longitudinal importante» en el muro «que está provocando o ha sido provocada por un abombamiento muy pronunciado del mismo, lo que ha originado un desplome considerable de dicho muro, que amenaza con un colapso de todo él y el consiguiente vaciado hacia las viviendas encaradas al mismo». Aunque son tres las casas expuestas, sólo la de esta pareja estaba ocupada. «La lluvia ha ayudado, pero el muro se cayó porque estaba mal hecho», se queja Lorena mientras su marido aprovecha para ver si le dejan entrar en casa unos minutos para coger algunas cosas.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios