Detienen a un hombre tras pedir auxilio su pareja por la calle

Agentes de la Policía Local y de la Nacional han detenido a un hombre de 35 años acusado de un delito de violencia de género por, presuntamente, maltratar a su mujer, que escapó del domicilio familiar para pedir auxilio a gritos por la calle. Según las fuentes consultadas, dijo que su marido la quería matar.

Los hechos sucedieron ayer, sobre las 9.45 horas, en la calle Manrique, en el barrio de la Victoria. Unos funcionarios de la Unidad de Señalizaciones de la Policía Local, que se encontraban de servicio en el lugar, se toparon con una mujer que venía corriendo calle abajo y que gritaba pidiendo auxilio, tal y como adelantó ayer SUR en su edición digital.

La mujer, que presentaba un hematoma en un ojo, contó a los agentes que venía sufriendo malos tratos de manera habitual. Y manifestó que, en esta ocasión, su marido la había amenazado de muerte, por lo que tuvo que huir, dejando en su casa a los tres hijos de ambos, el más pequeño de año y medio y el mayor, de ocho años.

Asomado a la ventana

Los funcionarios de la Unidad de Señalizaciones avisaron a la sala del 092 y, a su vez, requirieron a un radiopatrulla de la Policía Nacional que pasaba por allí en esos momentos. A partir de ese instante, la intervención se desarrolló de forma conjunta. Efectivos de ambos cuerpos se dirigieron al domicilio familiar y encontraron al sospechoso asomado a la ventana. Al parecer, seguía gritando a la mujer.

Los agentes trataron de convencerlo para que se entregara, pero -según fuentes policiales- se negó a salir del piso. Los policías, para evitar el potencial riesgo para los menores, idearon un plan. Decidieron pedirle las llaves de la vivienda a la mujer y, con sumo sigilo, subieron hasta la vivienda sin que el hombre se percatara de nada.

Una vez ahí, sin hacer ruido, desbloquearon la cerradura y accedieron al inmueble, sorprendiendo en el salón al individuo, que no ofreció resistencia al ver a los cuatro agentes que habían ido en su busca.

Tras inmovilizarlo, los policías identificaron plenamente al arrestado, que es de nacionalidad nigeriana. Al comprobar su nombre en la base de datos, descubrieron que sobre él pesaba una orden de «búsqueda, detención y personación» desde el pasado 25 de febrero por otra agresión precisamente a su mujer.

La víctima rehusó ser acompañada por los agentes a un centro sanitario para que le curaran el hematoma, asegurando que lo haría más tarde. El hombre, por su parte, fue trasladado a los calabozos de la Comisaría Provincial, donde los agentes de ambos cuerpos que intervinieron en el suceso comparecieron para instruir las diligencias del caso.

Casualmente, esta actuación conjunta se produjo el mismo día y casi a la misma hora que el Ayuntamiento de Málaga firmaba -junto a otros 24 consistorios andaluces- su incorporación al Sistema de Seguimiento Integral de los Casos de Violencia de Género (VioGén) del Ministerio del Interior.

Con este acuerdo, que se rubricó ayer en Sevilla, la Policía Local de Málaga recupera parte de las competencias que perdió a finales del año pasado. A partir de ahora, los agentes del Grupo de Investigación y Protección (GIP) colaborarán con en la protección de las mujeres que han sido víctimas de la violencia machista. En los próximos meses, se negociará el acuerdo para que también vuelven a tener determinadas competencias en el área de Policía Judicial.