El presupuesto de Onda Azul incluye la amortización de las cámaras que nunca llegaron

¿Se puede amortizar el gasto de un artículo que se ha comprado cuando nunca se ha recibido? Difícilmente, pero así figura al menos en los presupuestos de la televisión municipal Onda Azul, donde se refleja una partida para liquidar contablemente de forma progresiva los 68.256 euros que la Empresa Municipal de Gestión de Medios de Comunicación de Málaga abonó por adelantado durante los últimos meses de gestión de la anterior gerente, Fátima Salmón, por la compra de cinco cámaras y cuatro lentes que jamás llegaron. Según ha podido saber este periódico, el impacto económico sería inferior a los 2.000 euros, una cantidad prácticamente insignificante para una entidad que maneja un presupuesto de casi dos millones, pero en los últimos días ha traído de cabeza al equipo de gobierno del PP ante el temor de que esta circunstancia llevara al interventor del Ayuntamiento a echar para atrás las cuentas anuales de la empresa y, con ella, la de todo el holding municipal.

Finalmente, no será así. En su informe de las cuentas generales que será presentado el viernes en la comisión especial de cuentas para proceder a su formulación, el habilitado nacional da luz verde a los números de Onda Azul ya que contablemente este desfase no tiene repercusión porque la salida del dinero y la factura están. Pero no las cámaras, y por ello insta a los responsables de la empresa a reformular las cuentas durante lo que queda de año para que reflejen una imagen fiel de la situación económica del ente público.

A la espera del aval

Mientras tanto, de momento sigue sin llegar el aval bancario que el consejo de administración de Onda Azul aprobó dar a la sociedad Gain and Peak para recuperar los 65.000 euros que aún debe devolver a la televisión pública tras optar su actual gerente, la periodista Vanessa Martín Alloza, por resolver la adjudicación tras percatarse de estas irregularidades. Si ese aval que sirva de garantía del pago no llega antes de mañana, el Ayuntamiento acudirá a los tribunales. Lo que sí que llegó la semana pasada es un escrito notarial de Gain and Peak en el que se compromete a abonar la deuda en un plazo de 60 días.

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