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Juzgan a una mujer acusada de intentar matar a su madre con pastillas en el zumo

La procesada, que padece una depresión grave, intentó también quitarse la vida ingiriendo una cantidad indeterminada de fármacos

Montse Martín

Jueves, 17 de septiembre 2015, 00:38

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Padecía un trastorno ansioso-depresivo grave y llegó incluso a estar ingresada y fue sometida a tratamiento. Hace dos años intentó acabar con su vida y también con la de su madre, echándole somníferos y ansiolíticos en un vaso de zumo. La anciana llegó inconsciente al hospital, pero logró sobrevivir después de ser sometida a un lavado de estómago. La mujer, de 56 años, fue juzgada ayer por un delito de intento de homicidio. Declaró que no recordaba nada, aunque cuando ocurrieron los hechos confesó a los médicos que la acompañaron en la ambulancia que estaba arrepentida por lo que había hecho y que sentía «pena» de que «a ella no le hubiera funcionado» (los fármacos que tomó para acabar con su vida). Ayer madre e hija se volvieron a encontrar en la vista oral. La anciana declaró por videoconferencia. Dijo que tampoco recordaba nada y se limitó a mandar «un beso fuerte» a su hija y ésta le correspondió diciéndole: «Mamá, te quiero».

El fiscal pidió que la acusada fuera condenada por delito de intento de homicidio a cuatro años de vigilancia bajo custodia familiar y con control del juez de vigilancia penitenciaria, como medida de seguridad, ya que estimó la eximente completa de enajenación mental, dado que la mujer tenía anuladas sus facultades cuando ocurrieron los hechos.

El dramático suceso tuvo lugar en la vivienda familiar en Marbella, donde madre e hija convivían. Una pariente se encontró a la mujer somnolienta y a su madre en la cama inconsciente, hecho que corroboraron miembros de los servicios sanitarios que acudieron al domicilio y que testificaron en la vista oral. Las dos mujeres fueron trasladadas al Hospital Costa del Sol. La anciana presentaba intoxicación por benzodiacepinas (tranxilium y lorazepam) y fue sometida a un lavado gástrico.

Una médico de urgencias testificó que la mujer le dijo que se había tomado pastillas y que también se las había puesto mezcladas en el zumo a su madre.

Ninguno de los facultativos que declararon en la vista pudieron precisar la cantidad exacta de fármacos que tomaron ambas mujeres, pero coincidieron en que la ingesta masiva de este tipo de fármacos, sobre todo en personas de avanzada edad, puede provocar la muerte. Igualmente señalaron que también depende del nivel de tolerancia de cada persona.

Una doctora que acompañó a la acusada en la ambulancia declaró que le mostró su «arrepentimiento» por lo que había hecho a su madre y que le comentó que sentía «pena por que a ella no le hubiera funcionado (los fármacos que se tomó con la intención de acabar con su vida).

A la vista oral también estaba citada la víctima. Madre e hija se vieron por videoconferencia. La anciana le dijo al tribunal que no tenía nada que declarar y que no recordaba nada. En ese momento procesada le lanzó un «mamá, te quiero. Un beso» y ésta le contesto: «un beso muy fuerte, hija».

El fiscal modificó sus conclusiones. Consideró la eximente completa de enajenación y solicitó que la medida de seguridad durante cuatro años que en principio pedía que la mujer cumpliera en un psiquiátrico, lo haga bajo custodia familiar (en este caso, del marido) con control el juez de vigilancia penitenciaria. El abogado defensor manifestó su conformidad.

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