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Imagen de la escalera que da acceso a varias viviendas en la calle Martínez de la Rosa.
Un peaje penoso de sobrellevar

Un peaje penoso de sobrellevar

Piden rampas y arreglo de las escaleras que dan acceso a unas viviendas en Martínez de la Rosa

José Manuel Alday

Miércoles, 6 de mayo 2015, 13:19

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Casi al final de la calle Martínez de la Rosa, a la altura del número 128, hay unas escaleras que conducen a unas viviendas allí existentes en cuyos bajos hay un negocio inmobiliario. La orografía del terreno hizo que hace ahora cincuenta años se salvara de esa forma la pendiente existente en la parcela donde se construyeron esas viviendas. Ocurre que ya ha pasado medio siglo desde entonces y ese accidente geográfico no se ha visto aliviado con el paso de los años y constituye todo un doloroso peaje para las personas que tienen que acceder a sus viviendas o a su negocio. Así lo denuncia Francisco Alfonso Martín, responsable de la inmobiliaria que hay justo en los bajos del edificio. «A diario tengo que ayudar a las personas mayores que viven en el edificio a subir las escaleras, porque además de estos escalones, luego tienen que subir las de su casa, ya que este edificio no tiene ascensor y las criaturas llegan sin fuerza y no pueden con tantas escaleras». «El Ayuntamiento debía de colocar unas rampas para facilitar el acceso, como han hecho en otros muchos lugares», señala. Pero este no es el único motivo por el que reclama una actuación que lleva solicitando desde hace años sin ningún resultado. Y es que, según explica, debido a las lluvias y el mal estado del acerado, su local comercial sufre filtraciones, contratiempo que le está suponiendo un gasto extraordinario. «Llevamos 18 años solicitando que mejoren esto, incluso hace poco que se cambió el acerado de la calle, pero esto sigue igual. Más que por mi, lo siento por las personas mayores que viven en el edificio, personas muchas de ellas de más de ochenta años y a las que suelo ayudar a subirles las bolsas cuando enfilan las escaleras, porque apenas puedan andar», afirma.

Calle Hilera: Un viaje en toda regla

Primero se oyó un golpetazo, después una lluvia de objetos cayó del cielo y más tarde comenzaron a oírse una serie de misteriosos crujidos. Así hasta que el personal que ayer, sobre el mediodía, estaba a punto de cruzar el paso de peatones de calle Hilera se percató de lo que había pasado. Una camioneta había golpeado con su parte superior uno de los árboles existentes en esa calle, en el cruce con Armengual de la Mota, y le había provocado una herida en una de sus ramas. Del fuerte impacto cayeron a la calzada multitud de frutos del árbol que los coches reventaron.

Alameda Barceló: Semáforo mal ubicado

El viernes dábamos cuenta de la instalación de varios semáforos en diferentes zonas de la ciudad para tratar de garantizar la seguridad de los peatones al cruzar la calle. Uno de estos semáforos ha sido instalado en la Alameda Barceló, a la altura de la calle Varela, y no en la Avenida Barceló, altura calle Valera, como recogíamos erróneamente. Por cierto que la instalación de ese semáforo y de otro ubicado en la Alameda de Capuchinos fueron solicitados por la asociación de vecinos Victoriana de Capuchinos y de la fuente hace dos años.

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