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En Urbanismo, los funcionarios viven atentos al 'pasillo'.
La exjefa de Urbanismo no se arredra y batalla por un puesto

La exjefa de Urbanismo no se arredra y batalla por un puesto

Teresa Domingo demanda administrativamente volver a su cargo de responsable del Servicio de Licencias y agotará la «vía jurídica si hace falta». Porras irá a la comisión de Transparencia

Pilar R. Quirós

Miércoles, 22 de octubre 2014, 17:24

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No funcionan así las cosas, al menos en una empresa pública. Cuando alguna compañía quiere prescindir de los servicios de uno de sus empleados solo tiene que despedirle en una de las múltiples formas que deja en sus manos la reformada Ley Laboral. Pero cuando se trata de un funcionario, la cosa tiene otro cariz muy diferente. Podrán destituir a Teresa Domingo como jefa de Disciplina Urbanística y Licencias hace un mes y decir, entre bambalinas, que la situación con sus subordinados eran insostenible, pero lo cierto es que sin ir más lejos el pasado diciembre la habían ascendido dándole más galones. Lo que para muchos ahora era insostenible, ¿no ocurría hace escasos meses? El guión de la película no encaja bien las secuencias.

Digamos que cuando el gerente, José Cardador, se encontró en su despacho con el comité de empresa, siete trabajadores en total, y le llevaron un escrito pidiendo que le abriesen a Domingo un expediente disciplinario por «trato vejatorio» a sus subalternos, le ponían en bandeja su cese en el cargo. Pero hasta las cucarachas, si las hubiere, saben que esta no es la razón. Aunque la verdadera no la digan abiertamente. Y ella, Domingo, se atreviera a declararla:«los expedientes de Villas del Arenal, eso ha provocado mi cese», afirmaba asegurando que había recibido presiones para prevaricar. «Quien o quiénes hayan sido, lo guardo para mi defensa», añadía.

Aún así, como a carácter y a pantalones no le gana nadie, como bien explican sus compañeros de faena, dejó supervisados todos estos expedientes antes del día en el que se enteró de su destitución «por la prensa». Yahora van llegando gota a gota, lo que provoca que los vecinos se vayan enervando poco a poco.

Pero volviendo al punto de partida, como Domingo es personal de la Gerencia de Urbanismo podrá no formar parte del staff pero sigue manteniendo su categoría de jefa de servicio, aunque sea sin servicio. Por convenio. En la actualidad es técnico de grado medio en el Departamento de Planeamiento y Gestión Urbanística, que dirige Elena Rubio.

En el consejo de Urbanismo quedó claro que, al menos, no cobra los famosos complementos personales de 20.000 hasta 24.000 euros, que sí tienen la suerte de percibir otros ex jefes de Departamento como Miguel Ángel Ruiz Barrionuevo o Antonio Cabrero. Y como dicen en los pasillos, «esto le tiene que escocer».

Pero Domingo no se arredra y está alegando a los tres escritos de su destitución y agotará la vía administrativa para demandar su anterior puesto de jefa del Servicio de Licencias, el que, casualmente o no, está ocupado por su ex subordinado Luis Utrera, que ya quiso abandonar la nave pero Pomares amagó para evitarlo cuando conoció que la noticia iba a salir en esta sección.

La destituida sigue sin cartera y quiere la antigua suya, aunque fuentes del comité de empresa alegan que no consolidó la plaza. Para el gerente de Urbanismo es más sencillo:«Ella ha estado en un puesto que podría haber ocupado cualquier persona, hasta una alguien que no trabajase en la Gerencia, por lo que al volver a su plaza, si está ocupada, no se la podemos devolver. Mantiene, no obstante, su categoría profesional de jefa de servicio». No obstante, la ex jefa lo tiene claro y, según afirmó a este periódico, agotará «la vía jurídica» para que le restituyan sus derechos. Como dijo en una entrevista a SUR:«Yo valgo más por lo que callo que por lo que cuento». La frase de marras aún resuena entre funcionarios y miembros del comité de empresa.

Villas del Arenal. Porras irá a transparencia

La portavoz socialista, María Gámez, pedía ayer un careo entre Teresa Domingo y Teresa Porras, concejal de Cruz de Humilladero, distrito en el que se encuentran las casas expedientadas por pequeñas construcciones sin licencia. Al ser preguntado por esta cuestión el portavoz del equipo de gobierno del PP, Mario Cortés, afirmó que Gámez lo único que pretende es judicializar la vida política;«le molesta que en todos lo años que llevamos gobernando no haya habido un solo caso de corrupción, y tienen anhelo de que lo haya, y no lo habrá por mucho que lo intenten. Porras no puede cometer prevaricación porque no era superior de Domingo». No obstante, Cortés aseguró que la edil asistirá a la comisión de Transparencia para que la oposición le haga todas las preguntas que considere oportunas.

¿Mal rollo o ninguneo? Pomares no deja hablar al gerente

Muy comentado entre los ediles de la oposición ha sido el episodio final del consejo de Urbanismo, que pretendía cerrar el concejal Pomares con la siguiente frase conciliadora después del sermón:«Les pido, por favor, como consejeros (le decía a la oposición)que pidan vista de expediente de Villas del Arenal. ¿Hay alguna ilegalidad? Me fío de su criterio. Los expedientes están perfectos». En ese momento, Cardador solicitaba intervenir, a lo que Pomares añadía sin rodeos:«A menos que sea algo muy importante... que llevamos ya aquí muchas horas». Se hacía el silencio y Cardador se quedaba con la palabra en la boca. «No fue muy elegante, no estuvo bien», explicaba el portavoz de IU, Eduardo Zorrilla. Ese ninguneo, ¿será fruto del mal rollo o solo se trataba de tener la última palabra?

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