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El Centro acapara las quejas por ruido por el ocio nocturno.
La lucha contra el ruido se extenderá a los barrios para prevenir problemas futuros

La lucha contra el ruido se extenderá a los barrios para prevenir problemas futuros

Limitar la velocidad de los coches o prohibir la implantación de negocios en algunas zonas, entre las medidas que se barajan en el Ayuntamiento

Francisco Jiménez

Domingo, 17 de agosto 2014, 22:28

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Combatir el exceso de decibelios en el Centro, Pedregalejo o Teatinos que genera el ocio nocturno y en Carretera de Cádiz o Cruz del Humilladero por el tráfico rodado es un reto en el que, con mejores o peores resultados, Málaga lleva tiempo trabajando. Pero ahora, en el marco del segundo mapa estratégico de ruido, el Ayuntamiento pretende ir más allá y extenderá la lucha contra la contaminación acústica en zonas donde, al menos de momento, no hay problemas, pero que son necesarias proteger para evitarlos en el futuro. En estos casos se trataría de adoptar medidas no para reducir el ruido, pero sí para impedir que aumente.

¿Cómo? Con acciones preventivas como limitar la velocidad de los coches, con normas urbanísticas que obliguen a crear parques infantiles o áreas de recreo en espacios públicos para que no sean invadidos por mesas y sillas o prohibir la implantación de actividades potencialmente ruidosas en zonas que sean declaradas oficialmente como tranquilas y que, según la normativa andaluza, son aquellas donde no se superan los niveles establecidos para su área de sensibilidad.

Para poner en marcha estas medidas de prevención, el primer paso es definir y delimitar geográficamente esas áreas tranquilas, todo ello en base a los resultados de las mediciones realizadas en 2012 por toda la ciudad y que están recogidas en el segundo Mapa Estratégico de Ruido de Málaga. En este contexto, el Ayuntamiento acaba de sacar a concurso la contratación de un servicio de consultoría y asistencia técnica para la elaboración de planes de acción contra el ruido en la capital, con un presupuesto de 40.000 euros y un plazo de ejecución de siete meses.

Una prioridad

Por una cuestión de prioridades, el primer encargo de la empresa que resulte adjudicataria será hacer un estudio pormenorizado de los puntos más conflictivos de la ciudad y plantear propuestas de actuación correctivas más eficaces en cada caso. En una segunda fase, se hará lo propio con las denominadas zonas tranquilas y, en una tercera, analizar los diferentes escenarios en función de las denuncias y quejas ciudadanas registradas entre 2013 y 2014. A falta de conocer estos datos, los de los dos años anteriores constatan que el Centro, Teatinos y Puerto de la Torre son los distritos de la ciudad en los que más quejas y denuncias por ruido recibe el Ayuntamiento de Málaga a través de distintas vías. En ese periodo se contabilizaron 23.442 incidencias , lo que supone una media de 32 diarias. La mayoría, 19.961, fueron a través del 092. Le siguen las 544 registradas a través de la línea 900 900 000 y las 275 denuncias presentadas en dependencias de la Policía Local. El 70% de las quejas son por ruidos vecinales.

A partir de ahí, se delimitarán las distintas áreas y se establecerá un sistema de priorización de actuaciones a realizar a corto, medio y largo plazo en el que no sólo estará implicada el Área de Medio Ambiente, sino el resto de departamentos municipales que puedan contribuir a rebajar los niveles sonoros tales como los de Movilidad o Comercio.

En base a todos los estudios desarrollados, la consultora tendrá que sintetizar toda la información en un documento resumen tal y como exige el Ministerio de Medio Ambiente, el cual deberá someterse a un periodo de información pública y contar con el informe favorable de la Junta de Andalucía.

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