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Permiso de residencia del joven identifcado como autor del atentado.
Un conductor franco-tunecino fichado por delitos comunes

Un conductor franco-tunecino fichado por delitos comunes

El joven Mohamed Lahouaiej Bouhlel, de 31 años, vivía en Francia desde 2007 y no estaba vinculado a movimientos yihadistas

Colpisa / Agencias

Viernes, 15 de julio 2016, 08:54

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Tras el análisis de las huellas dactilares, la Policía ha confirmado que el joven francés de origen tunecino es el autor de la masacre. Las fuerzas de seguridad del Estado habían hallado documentos de identidad pertenecientes a un francés de origen tunecino de 31 años en el camión que este jueves ha atropellado a una multitud congregada en el paseo marítimo de Niza, matando al menos a 84 personas, según han informado los medios franceses.

La Agencia de Inteligencia y Consultoría de Seguridad (AICS), dedicada al seguimiento de los yihadistas, ha conseguido copia de este documento, que el terrorista llevaba encima en el momento del atentado, informa Melchor Sáiz-Pardo.

Se trata de Mohamed Lahouaiej Bouhlel, un conductor de envíos profesional y franco-tunecino de 31 años nacido en la ciudad tunecina de Susa, residente desde 2007 en Niza, cuyo apartamento en el sector norte de la ciudad ha sido escenario de un registro policial en las últimas horas. Bouhlel, padre de un hijo de tres años, no estaba fichado como sospechoso de terrorismo. Eso sí, tenía varios procedimientos judiciales abiertos, aunque solo había sido condenado por primera vez en marzo pasado a una pena de seis meses de cárcel, por la que no tuvo que ingresar en prisión.

El ministro de Justicia, Jean-Jacques Urvoas, ha explicado en un comunicado que el Tribunal Correccional de Niza condenó el 24 de marzo a Boulhel a una pena exenta de cumplimiento, por un altercado en una disputa de tráfico. Previamente, se le había impuesto un control judicial que cumplió en todos sus aspectos y que se levantó el día de esa sentencia. Durante ese control judicial, abonó la fianza de 1.000 euros que se le había fijado, fue a las convocatorias que tenía cada semana en comisaría y no se acercó al hombre con el que tuvo en enero un incidente de tráfico, al que agredió lanzándole un objeto de madera.

Según han apuntado vecinos de su barrio al canal 'BFM TV', el hombre se hallaba en trámites de divorcio y tenía problemas con su familia en Túnez, al parecer originaria de Susa, donde hace un año murieron 38 turistas en un atentado en las playas de dos hoteles. Su exmujer ha sido detenida. Los vecinos han apuntado que el hombre había comenzado el ramadán pero no lo había terminado, que era una persona a la que le gustaba salir a bailar y las mujeres, y que hace solo 15 días había sido colocado bajo control judicial por una infracción viaria, presuntamente por haberse quedado dormido al volante. También han señalado que tenía permiso de conducir vehículos pesados desde hacía poco y que sufría dificultades financieras.

En el barrio donde vivía, en el este de la ciudad, varios vecinos lo describen como "solitario y callado". "Yo nunca lo vi en la mezquita", asegura un guardia en un restaurante contiguo a la sala de rezo. A su lado, tres musulmanes practicantes asienten. El conserje del edificio en el que vivía el matrimonio lo describe como un hombre "muy violento con su mujer".

Armas

La investigación trata de determinar ahora si actuó solo -como los llamados 'lobos solitarios'- o bien si contó con la asistencia de cómplices entre su círculo de allegados.

El camión usado en el ataque, según las mismas fuentes, fue alquilado por el propio Bouhlel el miércoles, poco más de 24 horas antes del atropello, en una localidad limítrofe de Niza. El hombre tenía en su poder un arma corta de calibre 7.65 que utilizó antes de ser abatido por la Policía, pero también otras armas largas y una granada de mano, en ambos casos ficticias. En el camión también se descubrió una tarjeta de crédito y un móvil que podrían servir para avanzar en la investigación, ha precisado el canal 'BFM TV'.

La sombra del yihadismo

El 'modus operandi' del atentado responde al que preconizan los grupos yihadistas, por lo que las autoridades francesas los consideran inspiradores del crimen, a falta de reivindicación y de que se hallen vínculos con su autor.

"Aunque el atentado todavía no se ha reivindicado, este tipo de acciones se corresponden muy exactamente a las permanentes llamadas a matar" de los grupos yihadistas, ha indicado el fiscal antiterrorista, François Molins, en una comparecencia ante los medios.

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