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Pedro Pablo Kuczynski, presidente de Perú.
Kuczynski promete combatir la «corrupción, inseguridad y desigualdad» en Perú

Kuczynski promete combatir la «corrupción, inseguridad y desigualdad» en Perú

El nuevo mandatario pretende poner en marcha un proceso de modernización del país, para lo que necesitará el apoyo de la fujimorista Fuerza Popular, que cuenta con 73 de los 130 escaños

colpisa / afp

Jueves, 28 de julio 2016, 23:56

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El nuevo presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, ha anunciado en su discurso tras asumir el cargo la puesta en marcha de una lucha frontal contra la corrupción, la inseguridad ciudadana y las desigualdades sociales, para lo que ha pedido el apoyo del Congreso, de mayoría opositora.

Al mandatario de 77 años se le ha quebrado la voz en el momento de prestar juramento en el Congreso, ceremonia que coincide con los 195 de la independencia del Perú. Kuzcynski ha hecho un llamamiento a la paz, rechazando el enfrentamiento y la división, en un país que ha quedado polarizado tras las duras elecciones.

El presidente peruano ha establecido las prioridades de su mandato de cinco años y ha dicho que "no tendrá miramientos para combatir la corrupción".

"No permitiré, especialmente a mis funcionarios y colaboradores más cercanos, caer en la indignidad de la corrupción. Quien falle acabará ante la justicia, la cual debe ser profundamente reformada", ha dicho Kuczynski, un exitoso exbanquero de Wall Street.

La corrupción genera pérdidas en Perú por valor de unos 3.000 millones de dólares anuales. Por lo que según Kuzcynski, el país necesita una justicia independiente, autónoma para luchar contra la corrupción y que su gobierno se comprometa a fortalecerla y reformarla para que sea eficaz. "Si se quiere un país moderno, una nación más honesta, es necesario que toda la sociedad se levante para luchar contra la corrupción", ha precisado.

Asimismo, ha abogado por una "revolución social", para ser un país moderno, más justo, más equitativo y más solidario. Kuczynski ha dicho que un país moderno significa que las desigualdades entre los más pobres y lo más ricos deben resolverse aumentando el ingreso de los más pobres.

"¿Cómo poner más dinero en el bolsillo de los peruanos?", se ha preguntado, para responder que lo lograría "emparejando el acceso a servicios esenciales que hoy son escasos o inexistentes y, por tanto, extremadamente costosos".

"Ese objetivo se logrará cerrando las brechas en el acceso a la salud y la seguridad social, poniendo el bienestar de las personas como el objetivo fundamental de cualquier cambio o reforma", ha explicado.

Para el presidente, ser un país moderno "significa respeto irrestricto a la dignidad de la mujer y a sus derechos, respeto a una vida plena, a un pago igual ante trabajo igual, a su integrada participación política en las decisiones y en el gobierno", y sin discriminación a los pueblos autóctonos, en una nación donde la pobreza es del 22%.

Kuczynski pretende fortalecer las instituciones para enfrentar la inseguridad ciudadana, el mayor problema para el 70% de los peruanos.

Para lograr sus planes y reactivar la economía, solicitará facultades extraordinarias para legislar y poder reducir el impuesto a las ventas del 18% al 17% en el primer año, y llegar al final de su gestión con el 60% de la economía formalizada en lo referido a puestos de trabajo (actualmente la informalidad es del 70%).

En este aspecto, será clave el apoyo de la bancada opositora fujimorista Fuerza Popular, que cuenta con 73 de los 130 escaños. "No puedo hacerlo sólo (...) necesito la ayuda de este Congreso emblemático de la democracia", ha implorado Kuczynski.

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