Borrar
Vuelo de un parapente con los embalses del Guadalhorce de fondo.
Una prohibición de Aena impide el vuelo con parapente en la sierra de Valle de Abdalajís

Una prohibición de Aena impide el vuelo con parapente en la sierra de Valle de Abdalajís

La zona se ha regulado por seguridad, ya que está próxima a las trayectorias de los aviones de entrada y salida del aeropuerto

Javier Lara

Miércoles, 13 de julio 2016, 21:58

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La considerada como capital del vuelo no atraviesa sus mejores tiempos. De hecho, hoy por hoy no se puede volar en parapente, paramotor ni ala delta en la sierra de Valle de Abdalajís. Desde ENAIRE (antigua Aena) confirman a este periódico que por motivos de seguridad no está permitido el vuelo en la zona al estar dentro del espacio aéreo controlado, el conocido como CTRde Málaga. Por lo tanto, la sierra de Valle de Abdalajís está dentro del área de control del Aeropuerto de Málaga, es un área protegida dentro de todo el espacio aéreo gestionado por ENAIRE.

«A este tipo de aeronaves se le aplica la regulación de ultraligeros y no pueden operar dentro del espacio aéreo controlado», explican desde la empresa de gestión y control del tráfico aéreo.

Busca una solución legal

  • La Federación

  • Volver a volar en la sierra de Valle de Abdalajís de una forma legal. Ese es el objetivo que se ha propuesto la Federación Andaluza de Deportes Aéreos (FEADA) a través de su Comisión Técnica de Parapente. La solución pasaría por reducir el espacio de la zona de seguridad, algo que parece factible. «Desde la FEADA en estos momentos estamos redactando los documentos necesarios para llegar a acuerdos con AESA para poder practicar nuestro deporte con seguridad y dentro de la legalidad vigente en todas las zonas afectadas por la próxima reducción del CTR de Málaga que se publicará en breve», señala el responsable de parapente de FEADA, Daniel Blanco. En un comunicado del mes de abril, la federación indicó que el problema en parte está en la carencia de normativa estatal específica que contemple estas disciplinas ya que, a falta de una regulación específica, se viene aplicando la regulación genérica destinada a «todo lo que vuela».

Este tipo de actividades están prohibidas, ya que están próximas a las trayectorias de los aviones de entrada y salida del aeropuerto, de ahí su protección y limitación de ese espacio acotado. «La zona del Valle de Abdalajís es un área donde los aviones ya empiezan a efectuar las maniobras de descenso al Aeropuerto de Málaga de ahí la importancia de esta prohibición por seguridad de las operaciones», precisan las mismas fuentes.

La prohibición de ENAIRE proviene de una recomendación de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (Aesa). «Nosotros no hacemos la prohibición, la realiza Aena, pero en el caso de conflictos proponemos declarar zonas de seguridad como ha ocurrido en Valle de Abdalajís», explican fuentes de Aesa.

Aunque la prohibición existe y se empezó a difundir entre los practicantes de las diferentes disciplinas de vuelo en el mes de abril, todavía es mucho el desconocimiento sobre la materia que existe al respecto y es habitual seguir viendo vuelos de parapente en el cielo de Valle de Abdalajís. El motivo es que aunque entre los clubes locales se conoce la prohibición, hay deportistas llegados desde otros lugares que desconocen el impedimento legal. Precisamente, según explicaron deportistas a este periódico, todo vino a consecuencia del vuelo de unos parapentistas extranjeros que tomaron más altura de la que debían durante unas actividades en el mes de marzo. «Todos sabemos que por Valle de Abdalajís vuelan los aviones hacia Málaga y comienza la aproximación, pero volando hasta 1.500 metros nunca ha existido problema, pero se ve que se superó esa altura y hubo avisos», manifestaron. La prohibición no es única para Valle de Abdalajís, otras zonas de vuelo como Teba, Cañete la Real, Almargen, Alozaina, Álora o Pizarra también tienen el vuelo limitado y los ayuntamientos en colaboración con las fuerzas de seguridad del Estado son los responsables de tomar medidas, aunque según los deportistas no se ha llegado a ese extremo. De hecho, la sanción por volar en espacio de seguridad es una multa económica, además de requisarse el equipo de vuelo.

Debido a esta prohibición, Valle de Abdalajís no puede sacar todo el partido que buscaba a la afluencia de visitantes con la apertura del Caminito del Rey, ya que una de sus zonas de vuelo está abierta a los embalses del Guadalteba y otra al desfiladero de los Gaitanes. La presencia de formaciones montañosas, debido a las corrientes térmicas que provocan, permiten la realización de vuelos de larga distancia. La colaboración entre clubes y el ayuntamiento, junto con el carácter público de algunas de las pistas y los accesos, siempre ha proporciona una gran seguridad para la práctica en sus tres áreas de despegue.

Empiezan a frecuentar otras zonas

El vuelo de parapente en Valle de Abdalajís lleva varias décadas siendo impulsado por parte de empresas, clubes y escuelas, siendo las principales el Club Vuelo Libre Málaga, Eolox o Air- Born Adventures, junto a otras afincadas en distintos lugares que organizaban vuelos en esta sierra malagueña y que no han cesado completamente con la prohibición. Sin embargo, ellas mismas reconocen que tienen informados de la prohibición a sus socios y clientes y que empiezan a volar cada vez más en otros lugares como Loja o La Herradura en la provincia de Granada o Algodonales, en Cádiz. También organizan viajes a otras zonas de España. Según explica el presidente del Club Vuelo Libre Málaga, Ramón Catalán, sus socios intentan volar en otros sitios donde sí está permitido. «Todos tienen la información e intentamos volar en otras zonas, pero sí hay empresas que traen grupos de franceses y alemanes que se sienten perjudicadas», indica Catalán.

Los colectivos están muy pendientes de las noticias que puedan llegar para recuperar los vuelos con normalidad, aunque explica que todo pasaría por no rebasar una determinada altura. «Hay pilotos que son socios nuestros y que nos explican que nunca vuelan aviones sobre Valle de Abdalajís a menos de 2.300 metros y nosotros no pasamos de 1.500 metros», asegura.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios