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Pedro Gallardo muestra a los plantones que cultivará este año.
Los chiles más picantes del mundo se cultivan este año en el Valle del Guadalhorce

Los chiles más picantes del mundo se cultivan este año en el Valle del Guadalhorce

Jóvenes emprendedores apuestan por la producción con técnicas sostenibles y orgánicas para vender el producto en fresco y procesado

Agustín Peláez

Domingo, 3 de abril 2016, 12:15

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Los hay de muy distinta intensidad, forma y color. Por haberlos, los hay incluso blancos. Para algunos comerlos son un placer. Para otros en cambio representa un castigo insoportable. Sin embargo, el consumo de chiles o picantes no deja de subir. Se estima que se incrementa un 2,5 por ciento cada año. Su gran secreto es la capsaicina, que es el compuesto que provoca la irritación en los mamíferos. «Es lo que nos hace segregar endorfinas, la hormona del placer», señala Pedro Gallardo, uno de los promotores del cultivo de los chiles más picantes del mundo en el valle del Guadalhorce con fines comerciales.

«Los chiles están de moda. Actualmente existe un boom en todo lo relacionado con los picantes, especialmente en los Estados Unidos y Reino Unido, que junto a China e Italia son los principales consumidores de este tipo de pimientos en el mundo», dice.

Gallardo y sus socios están convencidos de que se trata de una actividad que puede resultar bastante rentable. Por este motivo el pasado año 2015 arrendaron en Cártama una parcela en la que realizaron pruebas con un total de 39 variedades de chiles de todo el mundo con el objetivo de comprobar su grado de adaptación al suelo y las condiciones climáticas. «La mayoría procedían de Sudamérica y Asia», señala.

Tras esa primera experiencia, Gallardo, que ha creado junto a sus socios la marca Mucho Macho para comercializar los picantes en fresco y procesados, han producido semillas y seleccionado 20 variedades, las que mejor se han adaptado, cuyo cultivo inician este año.

La empresa se ha marcado como objetivo alcanzar este primer año una producción de unas 40 toneladas. «Estamos en trato con algunos propietarios de invernaderos de la zona para dedicarlos a este cultivo también», explica Gallardo, que procede del sector del cáñamo industrial.

«Tenemos en mente comercializar los picantes en fresco, secos y molidos. Asimismo vamos a elaborar aceites de oliva picantes de diferentes variedades, de cara a comercializarlos tanto a nivel nacional como internacional. Nuestro objetivo es vender la producción tanto a granel como en diversos formatos bajo la marca Mucho Macho», declara.

Según explica, Mucho Macho es un aventura de un grupo de jóvenes emprendedores. La idea es producir con técnicas eco sostenibles y orgánicas. De hecho, ya han iniciado el proceso para obtener la calificación de ecológico.

«Usamos exclusivamente nutrientes y tratamientos autorizados en agricultura biológica. Nuestros terrenos han iniciado la tramitación al ecológico y tratamos los suelos con esporas de hongos y bacterias beneficiosas para el sustrato, y materia orgánica que regeneran el suelo e impiden la proliferación de hongos», señala.

Entre las variedades seleccionadas para producir este año se encuentra el temido Carolina Reaper, actual poseedor del Récord Guinness como el chile más picante del mundo con más de 2.200.000 unidades Scoville (SHU).

La capsaicina se mide en la escala Scoville, una medida del picor en los chiles. Se cuenta en unidades de calor, es decir, en el número de veces que una muestra de ají seco debe ser diluida por su propio peso en agua con azúcar antes de perder su calor. Actualmente se utilizan cromatógrafos de láser para medir el picor.

Otro de los considerados superchiles que prevé cultivar -la época de plantación abarca desde abril a mayo y la de producción comienza en la segunda mitad de junio, aunque se extiende hasta noviembre-, es el Trinidad Moruga Scorpión, con 1.463.700 SHU, o el Bhut Jolokia o chile fantasma, con más de 800.000 SHU.

El más picante del mundo

Para hacerse una idea de lo que ese poder picante significa basta con saber que un pimiento de Padrón, de los que pican, tiene un índice de 2.500 en la escala Scoville, mientras que un chile Habanero puede llegar hasta los 350.000. La capsaicina pura tiene 16.000.000.

«Aunque todavía no está testado, se cree que el Récord Guinness lo tendrá pronto el Chocolate Bhutlah. También vamos a hacer un ensayo con esta variedad para producirla», declara Gallardo, para quien el mundo de los picantes es muy rentable. En este sentido, pone como ejemplo que un kilo de chiles Carolina Reaper puede alcanzar los 180 euros.

«En este mundillo es muy normal que cada dos o tres años aparezca una nueva variedad mucho más picante aún. Existe como una especie de competencia entre los productores», afirma.

Según Gallardo, la manipulación de los chiles la hacen con guantes, ya que han sufrido más de un percance debido a descuidos al tocarse los ojos.

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