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Iván Gelibter
Miércoles, 2 de julio 2014, 01:38
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La crisis política y falta de buenos resultados electorales parece que comienza a pasar factura a los líderes políticos, aunque sean de pequeños municipios. Precisamente esa es la causa que aducen importantes fuentes populares para justificar la «renovación» del PP en la localidad de Álora, que ha provocado la dimisión de David Gutiérrez, portavoz del grupo popular y presidente de la formación en el municipio del Valle del Guadalhorce.
Según estas mismas fuentes, el asunto procede ya de la semana pasada, en la que una «tensa» reunión acabó con la comunicación «verbal» de Gutiérrez de su intención de dejar la presidencia y la portavocía del partido, aunque sin dejar su ac ta de conc ejal, lo que provocaría su paso al Grupo Mixto. Además de Gutiérrez, otro edil del grupo seguiría el mismo destino, aunque este sería, según pudo confirmar este periódico, primo del propio Gutiérrez. Justamente durante la tarde noche de ayer, el Partido Popular de Álora convocó una reunión con sus militantes para establecer una comisión gestora que lleve la dirección del partido hasta la creación de una futura junta directiva local. La persona elegida para presidir esta comisión será la hasta ahora número dos en la localidad, María Isabel Segura, que también asumirá las funciones de portavocía.
Aunque sin aclararlo del todo, Segura sí reconoció que los malos resultados del PP «habían tenido que ver» a la hora de realizar una renovación que, a la vista de los hechos, puede ser más dolorosa de lo que los populares a nivel provincial hubieran querido, ya que perderán dos de los seis concejales que tienen en el consistorio aloreño. Segura recalcó, además, que el trabajo y los votos conseguidos «son de todos», pero que muchos de ellos también son «gracias a la marca política», y que por tanto no está de acuerdo con la marcha del exportavoz y de su primo al Grupo Mixto.
¿Una renuncia efectiva?
Pese a que toda la serie de acontencimientos parece bien planificado por el PP, lo cierto es que ayer David Gutiérrez afirmó encontrarse «indignado» con la reunión prevista para anoche. Tal como afirma el portavoz saliente, su renuncia la comunicó de manera «verbal», pero afirma que en ningún caso tal dimisión es oficial porque, asegura, «no he firmado ningún papel que lo acredite». Aunque Gutiérrez sí confirma que dejará tanto el partido como la portavocía por «discrepancias puntuales» con la dirección provincial, no entiende que se convoque una reunión para elegir una gestora sin avisarle cuando no se ha hecho efectiva la presentación de la documentación pertinente.
Respecto al resto de militantes populares que presumiblemente dejarán la formación, las versiones son diferentes. María Isabel Segura cree que se marcharán «los amigos de David», a los que contabiliza en unas seis personas. Sin embargo Gutiérrez afirma que además de sus «amigos», cifra en unas 15 las personas que pertenecen a su propia familia, de las que está «prácticamente seguro» que también cesarán de su militancia. «Hay gente que no era del PP y que militaban porque creían en mi trabajo», afirmó.
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