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La fiebre del pantalón 'cagado' caló hondo.
El pasado oscuro de la moda

El pasado oscuro de la moda

Confiesa, tú también te creíste moderna con las hombreras, luciste las medias de rejilla y causaste furor con los pantalones caídos. Hay tendencias que son mejor olvidar

fátima burgos

Domingo, 23 de noviembre 2014, 02:22

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Las tendencias que triunfan sobre la pasarela y son acogidas por el asfalto son en muchas ocasiones, una reinvención de anteriores temporadas. En cada una de las décadas pasadas hay una tendencia clave, una prenda fetiche que todos llevamos y de la que solemos renegar a la mínima de cambio. Modas que nos dejan de gustar a la misma velocidad que amamos.

Y modas ha habido muchas. Algunas con mejor gusto que otras. Quien no recuerda las extravagantes hombreras de los ochenta, las medias de rejilla en colores o incluso las botas altas en pico de color blanco; porque sí, todos llevamos esas tendencias que perjuramos no ponernos.

HOMBRERAS

Si por algo es recordada la década de los ochenta es por ese interés constante de vestir cual árbol de navidad, con todo puesto. La extravagancia era seña de identidad y las hombreras, un verdadero 'must' de la época. Así las lucían en su versión más exagerada el grupo musical Loco Mía, y la moda más juvenil. En aquellos años no eras nadie sin un buen moldeado en el cabello y unos pendientes XXL de oro.

FALDA PANTALÓN

Y no, no nos referimos a los shorts efecto falda, sino a la moda de ponerse ambas prendas superpuestas. ¿En qué pensábamos? Ni era cómodo, ni quedaba bonito. Lo último, lo más 'trendy', era jugar con esta combinación no solo de prendas sino también de estilos, pues en muchas ocasiones el pantalón era deportivo y la mini, vaquera. ¡Un horror!

MEDIAS DE REJILLA

Y lo mejor en colores, cuanto más intensos mejor. Una verdadera fiebre adolescente de las que muchas renegamos en la actualidad entonando eso de'No, si yo nunca las llevé' Si, y combinadas con la mini falda, para ir de lo más conjuntada y creyéndonos las reinas del asfalto. Una tendencia que por suerte, poco tiempo después quedo relegada al más absoluto olvido. Y no es para menos, que me digan qué utilidad tiene ponerse unas medias que no protegen del frío.

PANA

Un tejido que todas nuestras madres se empeñaban en ponernos. Dicen que se vuelve a llevar, pero la respuesta de la calle es un no rotundo. Demasiado tiempo llevando pantalones y chaquetas de pana para volver a cogerlo con ganas. Su aspereza y sus limitaciones a la hora de combinar tampoco contribuyen a este discreto regreso.

PENDIENTES DE ARO

Si había un complemento estrella en el joyero esos eran los pendientes de aro. Y cuanto más grandes, mejor. Con las orejas rojas de puro dolor, ningún complemento podía superarlo. Lo fundamental es que se viesen bien, por eso, había que llevarlos con el pelo recogido. Aunque lo peor llegó con la versión de colores. ¡Terrible!

PANTALONES 'CAGADOS'

Este modelo de vaqueros se llevaban caídos y dejando a la vista la ropa interior. Un modelo que no solo resultaba poco favorecedor sino que además, muy cómodo no era. La fiebre del pantalón 'cagado' caló hondo, aunque por suerte, no duro demasiado en el tiempo.

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