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Francisco Griñán
Miércoles, 22 de marzo 2017, 11:29
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Una niña que pierde a su madre. Esa es la película que nos ha conquistado en esta jornada del Festival de Málaga. Se titula 'Verano 1993' y es el debut de Carla Simón, una cineasta que viene de ser premiada con este filme como mejor ópera prima en la Berlinale. Y lo normal es que la cinta aumente su palmarés con las Biznagas, ya que esta cinta superlativa y pequeña emociona al enseñarnos la vida a través de los ojos de Frida, una niña que se queda huérfana y se va a vivir al campo con sus tíos y su prima más pequeña.
Como la precedente 'No sé decir adiós', es un filme sobre la aceptación de la muerte, aunque en este caso con un planteamiento muy singular ya que la protagonista es sólo una pequeña de cinco años que intenta entender lo que está pasando.
Una película íntima que respira humanidad y que está filmado desde los sentimientos y descubrimientos de esta niña (Laia Artigas) que no solo conquista con su inocencia. También con la naturalidad con la que la directora nos muestra este drama tan personal y bien contado. Un bellísimo y delicado relato.
Tráiler oficial (VOSE) de 'Verano 1993'
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