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Regina Sotorrío
Domingo, 19 de abril 2015, 17:46
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Es un galardón para los realizadores más arriesgados, los que apuestan por un cine diferente. Él, con solo dos películas, se lo ha ganado. Paco León ha recibido esta noche rodeado de todo el clan León el premio Eloy de la Iglesia del Festival de Málaga. Y lo hace con una firme promesa: Tener el riesgo para buscar cosas bonitas y sinceras, unas saldrán mejor y otras peor, pero prometo intentarlo. Porque, como dijo con su guasa habitual: Tengo ganas de experimentar, y si hay que cagarla se caga.
El fracaso no le preocupa. Me da más miedo ponerme importante y no arriesgarme a hacerlo mal. Eso es más peligroso, reconoció. Y añadió: La he cagado muchas veces con dignidad, forma parte del trabajo.
Tras revolucionar el cine y la industria con sus dos 'Carminas' ('Carmina o revienta' y 'Carmina y amén'), Paco León trabaja ahora en su tercera película, una adaptación de una comedia australiana que hace por encargo y que empezará a rodar en verano. Y aunque esta vez no sea productor, su intención es 'apacolonearla' todo lo que pueda. Pretendo seguir haciendo lo que me da la gana, declaró. Si llega a tiempo, avanzó, la traerá el próximo año a Málaga. ¡Ojalá!, exclamó junto al director del Festival de Málaga, Juan Antonio Vigar, que elogió el talento, la creatividad y la generosidad del homenajeado.
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